Carlos Ramírez / Indicador Político / Narco, guerrilla y Estados fallidos

Oaxaca, Oax. 25 de julio de 2013 (Quadratín).- Del 2005 al 2013, Michoacán fue una plaza abandonada por los gobiernos estatales y los liderazgos políticos; hoy se cosecha lo que se sembró de descuidos.
La lista de incidentes llega a sorprender:
–Diciembre de 2006: ante la demanda de auxilio del gobernador Lázaro Cárdenas Batel y su ex secretario de gobierno y senador Leonel Godoy, el gobierno entrante de Felipe Calderón lanza una ofensiva general de fuerzas de seguridad sobre Michoacán.
–En las elecciones de gobernador de 2007 el perredista Cristóbal Arias acusó al candidato perredista Leonel Godoy de tener relaciones con el narco y que varios de sus colaboradores, entre ellos su chofer, estaba siendo investigado por la policía.
–El 15 de septiembre de 2008, en el escenario del Grito, estalla una granada en el zócalo de Morelia.
–Mayo de 2009: una operación policiaca sorpresa arrestó a funcionarios, políticos y presidentes municipales por sus relaciones con el narcotráfico; varios de ellos salen libres después por presiones políticas o por falta de pruebas.
–En las elecciones federales de 2009, Julio César Godoy, medio hermano del entonces gobernador michoacano Leonel Godoy, fue candidato del PRD a diputado; pese a las pruebas en su contra, varios perredistas, entre ellos Alejandro Encinas, lo metieron clandestinamente al Palacio Legislativo para que tomara posesión y consiguiera fuero; el 14 de diciembre de 2010 la Cámara votó por el desafuero, Godoy pasó a la clandestinidad; a la fecha está oculto para eludir órdenes de aprehensión.
–Octubre de 2009: una redada en los Estados Unidos desmantela al cártel de La Familia en territorio estadunidense.
–En marzo del 2011, derrotada La Familia, apareció en escena el grupo de Los Caballeros Templarios con mantas y estrategias de operación más sólidas que las de La Familia Michoacana. A pesar del alarde en la presentación, las autoridades federales y estatales ignoraron el grado de peligrosidad de esta banda.
–Ante las elecciones de gobernador en noviembre del 2011, el PAN y el PRI proponen un candidato común de los tres partidos –incluyendo al PRI– para conformar un bloque unido de gobierno en contra del crimen organizado; el PRD se niega.
–En junio del 2012 varios comandos de Los Caballeros Templarios organizaron una emboscada en contra de la Policía Federal y mataron a doce efectivos. En diciembre recibieron la toma de posesión del presidente Peña Nieto con mantas.
–En mayo del 2013 el gobierno del presidente Peña Nieto autorizó una segunda fase en la ofensiva federal contra el crimen organizado en Michoacán y esta semana ocurrieron dos emboscadas de Los Caballeros Templarios contra la Policía Federal.
–El grupo de Los Caballeros Templarios estaba aliado al Cártel del Golfo y a Los Zetas y su reaparición violenta ocurrió días después de que la Marina arrestó al Z-40, el jefe sobreviviente de Los Zetas, y descabezó al grupo que ha salpicado de crimen el noreste de la república por su lucha contra el cártel del Chapo Guzmán. La lucha ahora es por mantener las plazas.
En este contexto, la crisis de seguridad en Michoacán presenta un elemento central: al atacar violentamente a fuerzas federales de seguridad con estrategias propias de la guerrilla, el grupo Los Caballeros Templarios se convirtió en un desafío al Estado como fuerza, como poder y como autoridad.
El problema de Michoacán es que carece de mando: el gobernador Fausto Vallejo ejerció el poder sólo dos meses y solicitó licencia para separarse del cargo y dejar la administración a un interino que está falto de fuerza, de autoridad y de poder.
De ahí que la única salida pueda ser la de designar a un segundo gobernador interino con el apoyo de todas las fuerzas y constituir un gabinete de salvación estatal. Si no…
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