Entregan reconocimiento al mérito judicial y aprueban código de ética

Oaxaca, Oax. 12 de julio de 2013 (Quadratín).- El Oaxaca del siglo XXI, lleno de necesidades, requiere del jurista su inteligencia para mejorar las condiciones de nuestra comunidad y empezar a enraizar el sentido social de nuestra razón de ser como abogados; para ello debemos despojarnos de paradigmas que aún nos anclan, nos dispersan y nos dividen de toda posibilidad de desarrollo, afirmó el titular del Poder Judicial, magistrado Alfredo Lagunas Rivera.
En el marco del Día del Abogado, el presidente del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura encabezó la sesión solemne del Pleno de ese cuerpo colegiado en donde se entregó el reconocimiento al Mérito Judicial al magistrado Arturo Lázaro León de la Vega, la juez Dulce Genoveva Javier Agustín, y a la secretaria judicial Luz Elena Toledo Rodríguez. Además, se aprobó por unanimidad el Código de Ética para el Poder Judicial.
En su mensaje ante magistrados, consejeros de la Judicatura, jueces, directores y personal de diferentes áreas, así como el consejero jurídico del Gobierno del Estado, Víctor Hugo Alejo Torres, quien asistió con la representación del gobernador Gabino Cué Monteagudo, el magistrado Lagunas Rivera afirmó que el abogado es un generador de cambios frente a las trasformaciones transversales, como son el transitar de un “estado de normas” a un “estado de derechos con alto contenido de diversidad”.
Sin el estado de derecho como justicia de la dignidad, la sociedad estaría destinada a la degradación, puntualizó luego de hacer un llamado a sus colegas para hacer realidad el apotegma juarista e ir “del lado de la historia que registra la ética jurista como éxito de la justicia y no, como lastimosa carga de poca fe de una sociedad que ha visto en manos de los abogados la tiranía de la desviación”.
En el acto efectuado en el Salón de Plenos del Edificio Sede del Tribunal Superior de Justicia en Ciudad Judicial, subrayó que se debe agudizar la responsabilidad social del abogado, sus plataformas de crecimiento y desarrollo como “universidades” y “tribunales” que deben mirar a integrarse en una inteligencia colectiva que corresponda a las expectativas de justicia que la sociedad demanda.
Afirmó que el estado, la sociedad y los derechos conforman un gobierno, no de egos, sino de conciencia material que encarna día a día, la mente y el humanismo jurídico, “deben transitar a una nueva generación, fundada en la aspiración moral de un orden, la transparencia y rendición de cuentas, la tolerancia e inclusión, para abrevar rezagos y desconfianzas en el papel del abogado y la administración de justicia”

APROBACIÓN DE CÓDIGO DE ÉTICA
Al referirse al Código de Ética para el Poder Judicial del Estado, el magistrado Lagunas Rivera señaló que se integra con la lógica de encarnar los buenos hábitos para la función judicial, como respuesta a la ciudadanía que exige el anclamiento de prácticas opacas, sin responsabilidades, ni remordimientos y vergüenza pública.
“El Poder Judicial lleva dos años construyendo orden y el orden no puede ser conquistado, sin el hábito y la conciencia en donde estamos parados y a que nos debemos por lo que esta administración está comprometida por acción y no por retórica, a hacer prevalecer la dignidad de las personas y los anhelos de un pueblo de tener menos contaminación y mayor salud en la administración de justicia”, destacó.
Luego de clausurar la sesión solemne con la cual este órgano colegiado cerró también el primer periodo ordinario de sesiones correspondiente al 2013, el doctor Ricardo Sepúlveda Iguíniz, director general de Política Pública de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación dictó la conferencia magistral “Reforma Constitucional en Derechos Humanos y Amparo”.
El especialista en el tema, con estudios en la Universidad de Nottingham, Inglaterra señaló que el respeto y fomento de las garantías individuales es responsabilidad de los Tres Poderes, instituciones educativas y se vigoriza con la participación ciudadana que debe conocerlos para reclamarlos. Así también, reconoció el Poder Judicial ha sido más proactivo para su ejecución.

LOS GALARDONADOS
Este año, el mérito judicial fue entregado al magistrado Arturo León de la Vega, experto en Derecho Proceso Penal del Sistema Acusatorio Adversarial, con una amplia trayectoria dentro del Poder Judicial y se ha desempeñado como agente del Ministerio Público, Subprocurador de Justicia, coordinador de asesores de la presidencia del Tribunal, aunado a su actividad académica.
También fue distinguida con el galardón la juez Dulce Genoveva Javier Agustín quien ingresó a laborar en el Poder Judicial desde marzo de 1994 y ha realizado diversas especialidades en la materia de Derecho Familiar, Civil y Mercantil así como diplomados en Derecho Constitucional. Se ha desempeñado como juez en los Juzgados Primero de la Civil de Huatulco, Tercero de lo Familiar en el Centro; Primero, Tercero, Cuarto y Octavo Civil en el Centro.
Asimismo, el reconocimiento al Mérito Judicial fue para Luz Elena Toledo Rodríguez, secretaria judicial adscrita al Juzgado Familiar del Distrito Judicial de Juchitán de Zaragoza, se encuentra laborando en el Poder Judicial desde 1995 y ha prestado sus servicios con calidad y eficiencia en diferentes juzgado del estado. Los tres galardonados son egresados de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca.