Abelardo Martín / Dintel / PAN(dillas) en conflicto

Oaxaca, Oax. 24 de junio de 2013 (Quadratín).- Muy lejos de ir por la recomposición, la revisión y aceptación de desvíos, errores o equivocaciones, el Partido Acción Nacional se descompone cada vez más y exhibe su verdadera dimensión, así como la de sus dirigentes, con lo que se explica o se manifiesta, con toda crudeza, su enorme incapacidad para gobernar al país. Si son incapaces de gobernarse a sí mismos como partido y dan el espectáculo de pleito de pandillas o, como atinadamente observó Lía Limón en su momento, la conducta de ”cuatreros” (proclives a ”poner cuatros”) los invadió y se ha generalizado más allá de lo prudente y lo deseable.
Ya hay observadores que afirman que el PAN ha logrado sintetizar y asumir lo peor, sin duda, del peor priismo y también del peor perredismo al que las tribus azules se parecen cada vez más.
Tanto así que, el coordinador del Partido Acción Nacional en el Senado, Jorge Luis Preciado, presentó una denuncia contra la toma de la Tesorería de la bancada panista, que efectuó este jueves el senador Francisco Domínguez, acto considerado como un ”desalojo”. Preciado y el vicecoordinador general de la bancada, José María Martínez, denunciaron el hecho ante la Procuraduría General de Justicia del DF, a quien se solicitó la presencia del agente del Ministerio Público, así como la de un notario y un corredor público. ”No se levantó el acto contra alguien en específico, sino una denuncia de hechos, por lo que la autoridad correspondiente tendrá que determinar el delito que se persigue y al responsable”, expresó.
Preciado afirmó que no renunciará como líder, a menos que se lo pidiera el presidente Gustavo Madero, quien lo nombró de acuerdo a sus atribuciones.
La tarde de este jueves Francisco Domínguez, simpatizante de Ernesto Cordero, tomó las instalaciones del primer piso de la Torre Azul, sede de las oficinas administrativas y de finanzas del grupo legislativo del PAN. Domínguez –según los informes– llegó a la Torre Azul en medio de un operativo de seguridad con todo y notario público; exigió se le entregaran las llaves de la oficina, -pues según él mismo- fue nombrado nuevo Tesorero como parte de las reformas a los estatutos al Grupo Parlamentario del PAN que ayer aprobaron 23 senadores corderistas. Al respecto, Cordero Arroyo, afirmó que el cambio a los estatutos de su bancada garantiza transparencia y certeza, y que es una salida institucional con la que se le da ”vuelta a la hoja” en el conflicto interno.
”Con el cambio de estatuto interno del Grupo Parlamentario del PAN en el Senado de la República, la mayoría de los senadores del PAN le damos la vuelta a la hoja, resolvimos de manera institucional la transparencia y el orden con lo que se deben conducir las finanzas de un grupo parlamentario”, expresó. Señaló que el conflicto interno de la bancada panista que se suscitó tras su remoción, también se originó por un error administrativo.
De los cambios, se hicieron las notificaciones formales a la Mesa Directiva, a la Junta de Coordinación Política, a la Secretaría General de Asuntos Parlamentarios y Administrativos, ”de manera que se hicieron las notificaciones correspondientes”. Reconoció no haber hablado, personalmente, con el coordinador en funciones, Jorge Luis Preciado Rodríguez, pero alguno de los senadores presentes en el conclave de 23 legisladores panistas de la tarde del miércoles, se reunirán con él para ”platicarle y para que se sume a este esfuerzo de empezar a retomar el trabajo legislativo”.
Las fotografías difundidas de ese conclave muestran a los legisladores más como una pandilla en actitud de reto frente a sus adversarios y no a quienes pretenden reivindicarse con militantes y simpatizantes, a quienes se decepcionó por la incapacidad en el gobierno.
El cuñado del ex presidente, Felipe Calderón, Juan Ignacio Zavala, planteó correctamente el problema cuando afirma que el choque entre los calderonistas y los maderistas se debe a que ”hay una disputa por el poder y el futuro del partido”.
Hay que analizar los hechos, más que las palabras y comprobar si, en efecto, en el PAN abundan hoy los cuatreros.
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Foto: Archivo