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Tareas de Claudia sin AMLO: economía y Casa Blanca
Oaxaca, Oax. 31 de mayo de 2013 (Quadratín).- La dependencia respecto a las transferencias federales de las entidades federativas y municipios, se refleja en el impacto que tiene sobre sus finanzas, cualquier movimiento hacia arriba o hacia debajo de la recaudación federal participable o el retiro de recursos como los d los llamados excedentes petroleros que recibieron hasta 2008.
Como he comentado, sólo hasta diciembre del año pasado, las participaciones recuperaron su nivel real de 2008, y en 2009, 2011, 2012 y lo que va de 2013, han estado por debajo de lo programado, como reflejo del comportamiento de la recaudación de los principales impuestos como el IVA y el ISR, lo cual afecta las finanzas locales. El impacto se ha amortiguado gracias a la creación en 2006 del Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF).
En efecto este año las cosas van igual: al mes de mayo la RFP es menor en 4 por ciento a lo recaudado en el mismo periodo de 2012, con menor dinámica que el año pasado. El impacto en las participaciones es de menos 3.6 por ciento, respecto a lo recibido un año antes, siendo más fuerte en los casos de Coahuila con menos 9.7 % , SLP menos 6.6 %, Sinaloa menos 6.1%, Tlaxcala, EDOMEX y Colima con menos 5.8 %, etcétera.
En relación a lo estimado la reducción acumulada a mayo es de menos 3.8 por ciento., esto es 8 063 millones de pesos por debajo de lo estimado. Sólo ese último mes fue de 10 por ciento y el ajuste cuatrimestral resultó negativo.
Algunas reflexiones
En nuestro arreglo fiscal, desde 1980 cuando se crea el Sistema Nacional de Coordinación Fiscal, se acuerda que las entidades federativas dejarán en suspenso el uso de facultades impositivas que las que pueden disponer. Sin embargo con el fin de administrar impuestos nacionales, sin concurrencias fiscal, el gobierno central administrará las fuentes impositivas con mayor poder recaudatorio, lo que incluye los impuestos a la renta y al consumo, como el IVA y los IEPS.
Las entidades federativas en virtud del Convenio de Adhesión al Sistema, sólo pueden administrar impuestos de bajo potencial recaudatorio, como el de nóminas, hospedaje, anuncios, auto móviles usados y hoy una tenencia clonada con base reducida. Los municipios tienen facultades más limitadas, con excepción del impuesto predial, cuyo potencial es importante y ya se ha repetido mucho que estamos por debajo de lo que recaudan otros países latinoamericanos en relación al PIB, sólo 0.2 %, frente a un 0.6 % de Chile, pero en el mejor de los escenarios recaudatorios de este impuesto, lo cobrado sería insuficiente para financiar las necesidades de gasto de los municipios. Se critica mucho a los gobiernos locales, porque no recaudan más, pero el potencial recaudatorio de las facultades, es muy limitado y existe una renuencia de los gobiernos centrales a regresarles potestades más importantes o el regreso a sistemas concurrentes, como sucede en otros países como Brasil o España.
Respecto a la tendencia a dejar a los gobiernos locales sólo impuestos a los residentes, como el predial o a los vehículos sigue teniendo razón Richard M. Bird quien decía que es consecuente con la renuencia de la mayoría de los gobiernos centrales a proporcionar a los gobiernos estatales y locales el acceso a los impuestos sobre el ingreso o al consumo, que son mas lucrativos. No es de sorprender que se haya convertido en un lugar común. Por tanto, los gobiernos estatales y locales, casi en todas partes, han sido exhortados a hacer un mayor uso de los impuestos sobre la propiedad y son criticados cuando no lo hacen en forma muy entusiasta. No obstante en los municipios mexicanos el predial es la fuente de ingresos propios más importante.
Esa debilidad de las facultades impositivas de los dos ordenes de Gobierno mencionados, la concentración del potencial recaudatorio nacional en un solo orden de Gobierno, ha generado una fuerte dependencia de las entidades federativas y de los municipios, que reciben por esa vía un poco más del 90 % y 65 % de sus ingresos totales respectivamente, claro es un promedio donde hay asimetrías. El DF es caso aparte, dado que recauda más de la mitad de sus ingresos y la dependencia de las transferencias es menor. De ahí el impacto de una caida de la RFP.