Presentan Arte actual Oaxaca, para difundir a artistas oaxaqueños
Oaxaca, Oax. 22 de mayo de 2013 (Quadratín).- La Fundación Alfredo Harp Helú de Oaxaca presentará el próximo viernes tres hojas del códice de Yanhuitlán que fueron encontradas recientemente.
En la presentación, que será en la Capilla del Rosario en el Exconvento de San Pablo, estará la doctora María Isabel Grañén Porrúa, el doctor Sebastián van Doesburg y el maestro Francisco Toledo.
De acuerdo con van Doesburg, el Códice de Yanhuitlán es uno de los documentos pictográficos mejor conocidos de la Mixteca.
En sus hojas de papel europeo plasma la narrativa dramática de los décadas inmediatamente posteriores a la conquista.
Escenas de conflicto, de encuentros entre nobles mixtecos y los frailes dominicos o los encomenderos españoles, de tributos y objetos de culto llenan las página del documento.
De acuerdo con su temporalidad, los dibujos del códice revelan un estilo híbrido, el cual conserva las convenciones de la escritura pictográfica de origen prehispánica pero a la vez ya absorbe elementos de la gráfica española, como la perspectiva y el moldeado mediante el sombreado.
Lejos de constituir una degeneración cultural, representa un momento creativo extraordinario, en que las culturas lograron enriquecerse mutuamente, en una época que era en lo demás devastadora para la población mixteca.
En este sentido, el documento viene a ser pariente de creaciones contemporáneas como la Casa de la Cacica de Teposcolula, que repite esta fusión de culturas en el plano arquitectónico. Como es sabido, fue el breve auge de la industria de la seda entre 1540 y1580, representada por cierto en el códice, que hizo posible sostener esta florecimiento cultural económicamente.
Desde el siglo XIX, la mayor parte de las hojas del códice (12) está guardados en Puebla, y hoy en la Biblioteca José María Lafragua de la Universidad de Puebla. En la década de 1940, se encontraron cuatro hojas adicionales en el Archivo General de la Nación.
Hasta recientemente, la mayoría de los estudiosos pensó que esto era lo que había sobrevivido del códice. Sin embargo, durante los últimos años del Porfiriato, el incansable historiador oaxaqueño Manuel Martínez Gracida ya había visto y copiado otras tres hojas existentes en manos particulares en la Mixteca oaxaqueña. Sin embargo, estas hojas habían desaparecido de la vista de nuevo después.
Ahora, más de un siglo más tarde, fueron recientemente reencontrados y adquiridos para Oaxaca por un grupo de ciudadanos e investigadores comprometidos con la cultura de Oaxaca.