Bloquean vecinos de la Gómez Sandoval por obra inconclusa
Oaxaca, Oax. 04 de mayo de 2013 (Quadratín).- En Oaxaca si bien no se han registrado hechos de violencia de magnitud equiparable a otras entidades del país, el principal riesgo para la seguridad es la debilidad institucional frente a las movilizaciones que afectan el orden público.
Así lo consideró el experto en el tema, Eduardo Guerrero, durante una conferencia que ofreció ayer en la biblioteca Francisco de Burgoa del Centro Cultural Santo Domingo, en el marco del ciclo Oaxaca en el debate nacional.
Ante el historiador Carlos Tello, expuso que en el estado se registra en promedio una manifestación diaria, mientras que comercios del Centro Histórico de la capital registran pérdidas diarias en promedio superiores a los 40 millones de pesos.
Asimismo, en el gobierno de Gabino Cué Monteagudo se han incrementado las protestas, pues mientras en 2010 se registraron 192, en el 2011 fueron 424 y en el 2012 ocurrieron 323, ello con base en datos de la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
Respecto de los bloqueos a carreteras, tienen una duración en promedio de uno a tres días y generan pérdidas económicas diarias de más de 50 millones de pesos; el 8 abril, la Conatram decidió suspender el envío de cargueros a Oaxaca. En tanto, la región del Istmo de Tehuantepec es la zona del país con más bloqueos.
Por otra parte, el ex asesor de la Presidencia de la República y del Centro de Investigación en Seguridad Nacional abundó que Oaxaca tiene baja incidencia del crimen organizado, al registrar el 1.2 por ciento de ejecuciones totales en el país en el primer trimestre de este año.
Los municipios con más ejecuciones son Tuxtepec con 43, Oaxaca de Juárez con nueve, Putla con ocho, Salina Cruz con siete y Juchitán con siete.
Las redes comunitarias sólidas, la ausencia de organizaciones criminales con arraigo social y el carácter marginal de rutas del narcotráfico y mercado de drogas en Oaxaca, han contribuido a evitar escalamientos de violencia, señaló durante su ponencia.
Por último, puntualizó que otro de los riesgos de seguridad en Oaxaca es la continua agresión a alcaldes, pues en el periodo de 2007 a 2013, registra el más alto índice en el país, lo que refleja la vulnerabilidad de las autoridades.