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México, DF. 23 de octubre de 2012 (Quadratín).-Los legisladores federales del PRD impulsaremos una reforma laboral que garantice una vida digna a los trabajadores y el aseguramiento de sus derechos constitucionales, asentó ante el pleno del Senado de la República el congresista oaxaqueño, Benjamín Robles Montoya.
En sesión ordinaria de este martes, en que fue aprobada la Reforma Laboral, Robles Montoya aseguró: Que le quede claro a los ciudadanos de México, en el PRD impulsaremos una reforma laboral que amplíe el derecho al trabajo, desde una noción democrática y social en la defensa del empleo, con su impulso ligado al crecimiento económico y la remuneración integral que garantice la vida digna de las familias y personas. Pelearemos también por la democratización de la vida sindical, pero, ante todo, buscaremos garantizar el pleno aseguramiento de los derechos consagrados en el 123 constitucional.
Ante la asamblea senatorial, en nombre del Grupo Parlamentario del PRD en el Senado, refirió que hace 95 años, con la aprobación de la Constitución de 1917, México se convertía en un referente internacional, al proteger por primera vez en un texto constitucional los derechos sociales de la clase trabajadora.
Pero, dijo que, lamentablemente, 95 años después no podemos decir lo mismo, porque muchos de los artículos de la reforma presentada por el presidente Felipe Calderón lastiman profundamente a la clase trabajadora y en consecuencia de ello a los que menos tienen.
Históricamente las causas de los trabajadores han sido y serán las causas de la izquierda mexicana y del Partido de la Revolución Democrática. Con esto, no queremos decir que el PRD está en contra de las reformas que representen un avance para el país, pero la iniciativa aprobada no repercutirá en el desarrollo económico del país sino por el contrario, consideramos que esta iniciativa intenta tratar igual a los desiguales, señaló Robles Montoya.
En ese sentido, precisó que la propia Suprema Corte de Justicia de la Nación ha sostenido que los patrones y los trabajadores no pueden ser tratados de la misma forma, y por ello en diversos juicios se suple la deficiencia de la queja a favor del trabajador.
Sobre los artículos que en lo particular el PRD se reservó para su discusión, expuso que fue porque desaparezca como causal de despido la falta de probidad y honradez de las parte de los trabajadores en contra de clientes y proveedores del patrón; porque la relación laboral conforme a la Constitución y la legislación laboral se integra por el patrón y el trabajador.
En este sentido, mencionó que los clientes y proveedores no deben estar contemplados en dicha reforma, pues esto significa una irrupción indebida en las condiciones de bilateralidad de dicha relación laboral; y se pronunció porque la figura del despido (justificado) sea con reglas claras y equitativas.
Otro de los artículos que no compartimos es que el despido se concretice a una simple comunicación del patrón al trabajador. Por lo que hemos dicho que el patrón que despida a un trabajador deberá levantar un acta de rescisión con intervención del trabajador, un representante del sindicato respectivo y deberá tener una relación pormenorizada de los hechos y testigos que den fe de dicho acto, manifestó.
Asimismo, lamentó que el pretexto esgrimido por los impulsores de esta reforma, que por cierto es el mismo que se ha venido repitiendo hasta el hartazgo en países como España, de flexibilizar el mercado laboral para incentivar la generación de empleos y atraer capital e inversión privada, carece de sustento.
Alertó que los nefastos resultados están a la vista, y es que el hecho de precarizar el trabajo, convirtiéndolo en un factor de inestabilidad más que en uno de seguridad, para el trabajador y su familia, tiene repercusiones directas en la consistencia del tejido social.
Sin embargo, reconoció que hace falta una reforma laboral al país, eso es evidente, pero una reforma que pase por el mejoramiento de la calidad de los empleos y las condiciones de vida de los trabajadores.