
Gabriela Salomé Loaeza, nueva titular del RAN en Oaxaca
México, D.F. 22 de agosto 2012 (Quadratín).- Comprometida con políticas encaminadas a erradicar la pobreza y a promover un enfoque de género, la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) trabaja en una estrategia integral para eliminar la desigualdad y la discriminación contra las mujeres, principalmente en las comunidades indígenas.
Las mujeres son el centro de la política social y trabajamos para poner fin al lastre de la discriminación, tanto en sus hogares como en la calle, para insertarlas plenamente en la vida social y económica, al ser ellas el verdadero tesoro de nuestra Patria, ha dicho el Titular de la Sedesol, Heriberto Félix Guerra.
Como eje de la política social del Gobierno Federal, el Programa de Desarrollo Humano Oportunidades llega actualmente a 20 mil localidades, en beneficio de 6.5 millones de familias, en las vertientes de educación, salud y alimentación, con la responsabilidad y confianza depositada en las mujeres, quienes son las titulares.
Las transferencias económicas del Programa generan que 5.8 millones de familias en pobreza o vulnerabilidad socioeconómica puedan acceder a mejores niveles de bienestar, al tiempo que ayudan a reducir desigualdades, cerrar brechas e impulsar la equidad social.
En el reciente ciclo escolar, 1.35 millones de niños recibieron becas de estudio, pero destaca que las mujeres reciben en total 250 millones de pesos más que los varones, con lo que se ha logrado que la población escolar femenina en secundaria y bachillerato sea igual o incluso mayor que la masculina.
Otra de los programas de la Sedesol con perspectiva de género es el de Estancias Infantiles, que apoya a las mujeres jefas de familias que estudian, trabajan o buscan emplearse; entre ellas están quienes viven en 425 municipios predominantemente indígenas.
Actualmente, el programa promueve el cuidado y alimentación de casi 300 mil niñas y niños, a través de las 9 mil 502 Estancias Infantiles existentes en el país, 97 por ciento de ellas administradas por mujeres.
El Programa de Estancias Infantiles se aplica en mil 230 municipios y ha atendido a más de un millón de niñas y niños, a quienes brinda cuidado y alimentación, además de impulsar el desarrollo de sus capacidades mientras sus madres estudian o trabajan.
Del total, 673 estancias se ubican en municipios de alta marginación, además de que el programa ha generado 42 mil fuentes de ingreso entre responsables y asistentes, casi en su totalidad mujeres.
Por otra parte, para erradicar la violencia contra la mujer e insertarla en la vida social y productiva del país, la Sedesol ha destinado, en la presente administración, más de mil millones de pesos a través del Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol), presupuesto con el cual se fomenta la independencia y el empoderamiento del sector.
A través del Programa de Atención a Instancias de Mujeres en las Entidades Federativas (PAIMEF), los recursos se aplican en la creación de refugios, casas de tránsito, centros de atención médica y adquisición de unidades móviles para otorgar ayuda médica, psicológica y jurídica a mujeres víctimas de la violencia social o intrafamiliar.
De la misma forma, la Sedesol ha llegado hasta las comunidades más remotas, muchas de ellas indígenas, con el Programa Opciones Productivas, el cual ha representado un cambio cualitativo y cuantitativo para las mujeres, como en el caso de San Esteban Atatlahuaca, en Oaxaca.
En esa localidad montañosa, las mujeres son las principales promotoras de un invernadero de rosas, cuyos productos comercializan en Tlaxiaco, la segunda ciudad más poblada de la Mixteca Baja. Ahora son las mujeres quienes dan empleo a los jóvenes, desalentando la migración hacia los Estados Unidos.
Desde que las mujeres mixtecas trabajan en el invernadero, surgió la necesidad de que en su ausencia alguien cuidara de sus hijos. Para satisfacer la demanda, la Sedesol inauguró recientemente la estancia infantil Momentos Felices y Mágicos, en beneficio de 23 niñas y niños.
Con estas acciones, la Sedesol avanza en su propósito de insertar a la mujer en la vida productiva, eliminar la discriminación y empoderarla como actor imprescindible en la vida social y económica del país.