Continúan agresiones en contra migrantes y al padre Solalinde

Autoridades civiles y eclesiásticas
A los medios de comunicación
A la sociedad civil
Oaxaca, Oax. 16 de abril del 2012 (Quadratín).- Ya celebramos una Semana Santa más, y ahora estamos en tiempo de Pascua. Sin embargo muchos hermanos migrantes siguen viviendo su viernes santo y cargando su pesada cruz en un viacrucis interminable. Los acontecimientos que vivió Jesús, deberían de acercarnos más a él en la persona de nuestro prójimo, no obstante, pareciera ya que cada día nos estamos alejando más de la respuesta que el Maestro quisiera recibir de nosotros.

HECHOS:
El 31 de Marzo del presente año, amaneció frente a las vías, a la altura del Bar Sabor de la Noche, un joven de la población, conocido como Chuchín. Su cuerpo en pedazos yacía esparcido a un lado de los rieles. El Padre Alejandro Solalinde y otros miembros del Albergue acudieron de inmediato al lugar de los hechos. Ya se encontraban ahí personas del Grupo de Rescate Urbano, entre ellos Carlos Tirado. Los Policías Privados del Ferrocarril nos impedían tomar fotografías, lo cual cuestionamos pidiendo la fundamentación legal de esta medida. De pronto se acerco Carlos Tirado en apoyo de los Policías. Al ver que se aproximaba esta persona, el Padre Solalinde se alejó del lugar y se dirigió hacia su vehículo para evitar que éste tomara fotografías y después las fuera a tergiversar en la Prensa. Esto lo molestó mucho y empezó hablar mal de los migrantes y a insinuar que ellos habían sido responsables de esta muerte. Parte de ese Grupo de Rescate Urbano y algunas personas más siguieron hablando de lado de la Colonia de los Doctores. Un migrante que trabajaba enfrente de donde estaba el grupo hablando, los escuchó inculpar a los migrantes de esta muerte y empezaron a decir que a este joven lo habían matado con machetes los migrantes; que ya era mucho lo que estaban haciendo esos “Cachucos” y que iban hacer una carta para exigir al Gobernador el cierre del Albergue. Y que si un migrante les pidiese dinero, que se le diera “comida envenenada”
El migrante no intervino pero apenas terminó de trabajar llegó a avisar al Albergue lo ocurrido a fin de que previniésemos a los y las migrantes, de esta nueva amenaza. Así lo hicimos. Se les pidió que no comieran nada fuera del Albergue. Incluso se les fue a avisar a los que estaban en las vías.
El Padre Solalinde acudió a la casa donde se velaba al joven y expresó su solidaridad con la familia. Para sorpresa nuestra, el mismo grupo de Rescate Urbano y otras personas que habían, estado incriminando a los migrantes, entre ellas se encontraba un asesor del señor Sindico Municipal (güero, estatura regular). Habían estado influyendo sobre la familia, quien ya empezaba a creer esta versión y con su lógica de interponer una denuncia penal. El Padre Solalinde le explicó, y ella entendió que los migrantes no eran los culpables de esta muerte.
El Padre Alejandro Solalinde inició la celebración de exequias explicando a la gente lo que estaba pasando y cómo este Grupo de Rescate Urbano y en especial Carlos Tirado estaba incriminando a los migrantes; y cómo algunos de ellos estaban proponiendo hacer una carta al Gobernador exigiéndole el cierre inmediato del Albergue, al mismo tiempo que acordaron dar “comida envenenada” cuando algún “Cachuco” les pidiese dinero.
Este grupo de Rescate todavía con su uniforme y junto con otras personas que estaban tomando bebidas alcohólicas, se pusieron de pié, levantaron la voz expresando su inconformidad y abandonaron de inmediato el lugar. Dos de ellos se vinieron hacia el Padre Solalinde; una joven prima de Chuchín detuvo a uno de ellos, a quien increpó defendiendo a los migrantes. El otro continuaba acercándose al celebrante, pero fue atajado por dos tías de Chuchín. Ellas al mismo tiempo que le hablaban impidieron su avance. Los Policías que cuidan al Padre Alejandro se acercaron pero no intervinieron, se mantuvieron a una prudente distancia, pero listos para actuar en cualquier momento. Cabe mencionar que entre las personas que estaban adelante, se encontraba Caloto, señalado frecuentemente con el narcomenudeo de estupefacientes.
Terminada las exequias, el sacerdote fue advertido que las personas que se habían retirado lo esperaban para agredirlo, razón por la cual tuvo que salir escoltado y de prisa hasta la camioneta. El enojo de estas personas se debió a que, sin ser nuestro propósito, les desactivamos su plan anti-migrante.
Al día siguiente una persona muy conocida acudió al Albergue para advertirnos que el señor Ángel Gregorio López González quien se hace pasar como abogado gestor, le externó que unas personas cuya identidad no reveló, ya habían contratado a un sicario “que es mejor que la Changa” para asesinar al Padre Solalinde. La Changa es un matón famoso del pueblo vecino de Ixtaltepec.
Al día siguiente, la misma persona nos confirmó la amenaza al Padre Solalinde.

SEGUNDO EVENTO:
NUEVA AGRESIÓN CONTRA LA PERSONA Y EQUIPO DEL PADRE SOLALINDE.
Alrededor de las 17 horas, del día 15 de abril del presente año, el Padre Alejandro Solalinde se encontraba todavía recibiendo y dando la bienvenida a un contingente migratorio, estimado en su salida, de unas 1500 personas procedentes de Arriaga. Dos personas en estado de ebriedad, de aproximadamente 50 años de edad, irrumpieron en el cruce del ferrocarril con la calle Allende, quienes empezaron agredir verbalmente a los migrantes que pasaban y también al Padre Solalinde, señalándolo con el dedo índice, le gritaban que era “un pinche pollero” que por eso ya lo habían metido a la cárcel. A lo que el Padre Solalinde les cuestionó sobre tales imputaciones e insultos. Ellos se enojaron y dijeron que iban a regresar con gente de la Coordinadora Democrática de los Pueblos (CDP) cuyo dirigente es Roberto López Rosado, mientras seguían señalando y repitiendo los insultos, agregando además que iban a regresar a matar al Padre Solalinde. En ese momento llegó un hombre a bordo de un automóvil CORDOVA color plateado, marca SEAT, plateado, sin placas de circulación con propaganda de Carol Altamirano, dicha persona se encontraba aparentemente en cierto estado de ebriedad. Intervino a favor de ellos, alegando que eran sus amigos, le dijimos que ellos estaban agrediendo verbalmente y él afirmó que se los iba a llevar. Dijo ser el Doctor Jorge Antonio Cruz Aguilar. Se dirigió al Padre Solalinde, preguntándole que quien era él, a lo que él contestó que es el Director del Albergue de Migrantes Hermanos en el Camino. Esta misma persona los obligó a meterse al auto para llevárselos.
Cabe mencionar que nadie del Equipo de Voluntarios del Albergue, ni algún Policía del Estado que nos cuida, contestaron a las agresiones. Decidiendo retirarse al Albergue.
Este clima de violencia en contra de los migrantes, del Albergue y del Padre Solalinde no ha parado en Ciudad Ixtepec. Las Autoridades Municipales no han sido capaces tampoco de frenar las agresiones de cierta parte de la Población pero lo paradójico de esta situación que las dos últimas agresiones nos han venido de gente cercana a la Administración Municipal.
El Grupo de Rescate Urbano del Señor Zarif Armenta incluye a personas que dicen ser periodistas y son los primeros en llegar a un evento para orientar la información, procurando involucrar siempre a los Migrantes en todo hecho delictivo que sucede en Ixtepec. Cabe mencionar que este Grupo de Rescate Urbano depende de la Regiduría de Desarrollo Económico a cargo de Magdalena Tirado, hermana de Carlos Tirado. El señor Armenta, coordinador de Rescate Urbano está en la Nómina a través de esta Regiduría.
Estos últimos hechos se dieron en los diálogos entre Autoridades Municipales y el Albergue en el contexto de Medidas Cautelares dictadas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA). Estos diálogos tienen como finalidad disminuir la criminalización en contra los migrantes, el Albergue y el Padre Solalinde. Pero curiosamente desde que empezamos los diálogos se han incrementado las agresiones. Cabe mencionar que el Cabildo en pleno, encabezado por el Presidente Municipal se comprometió a continuar el diálogo fijando fecha, hora y lugar (13 de abril a las 11 horas en la Sede de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos) pero sólo llegó el señor Síndico Municipal , José Evid Toledo. Este hecho refleja el poco interés que estas autoridades tienen para con los migrantes y Albergue, pues no han sido capaces de parar las agresiones que gente allegada al Municipio y a su partido las han ocasionado.
Por lo cual invitamos a las Autoridades de los tres niveles de Gobierno y los responsables de la feligresía católica a redoblar esfuerzos para crear una conciencia solidaria para con esta población migrante tan vulnerable y todas aquellas personas o grupos que necesiten de nuestra atención especial. A los medios de Comunicación, tan golpeados por defender la verdad, les agradecemos su solidaridad, al mismo tiempo que los alentamos a seguir apoyando lo que es justo.
Albergue de Migrantes “Hermanos en el Camino”, A.C