
Confirma Fiscalía disparos en San Martín Mexicapan
Oaxaca, Oax. 24 de marzo del 2012 (Quadratín).- En el año 2010 hubo un total de 10 bandas desarticuladas dedicadas al secuestro; en 2011 la cifra se duplicó pues se desarticularon 20 bandas, dio a conocer el procurador de justicia del estado, Manuel de Jesús López López.
El Procurador de justicia explicó que respecto a las personas detenidas relacionadas con secuestros entre los años 2008-2010, fueron 21, mientras que tan sólo en el 2011 fueron 67, se duplicó la desarticulación, la detención, además de fijarse la figura de arraigo, destacó.
Con ello, abundó que se incremento el número de consignaciones en un 206 por ciento con un total de mil 827, por lo que adjudicó la labor de unos 140 nuevos peritos.
López López señaló que en las medidas estándar de seguridad en toda la República Mexicana, Oaxaca es el octavo Estado más seguro; sin embargo dejó claro que la ciudadanía tiene una labor constante para mejorar las condiciones, reportando, denunciando, contribuyendo; la justicia debe tener los ojos de todos los ciudadanos.
No obstante, precisó que lamentablemente en enero y febrero, se registraron cuatro autosecuestros registrados por jóvenes en su mayoría, por lo que hizo un llamado a los ciudadanos de ser responsables con su seguridad y la de sus familias.
Cabe señalar que el autosecuestro representa hasta el uno por ciento de los secuestros denunciados, por lo que es un delito que en 46 por ciento de los casos cometen jóvenes de 18 a 25 años, donde el 89 por ciento corresponde a hombres; el siete por ciento lo realizan mujeres, y el resto lo efectúan personas de ambos sexos.
En general el autosecuestro es un delito que se realiza con poca pericia; muchas veces es el propio autosecuestrado quien finge la voz y toma las decisiones.
Finalmente afirmó que existen dos indicativos para identificar el autosecuestro, el dinero demandado y el tono en la voz del supuesto captor; las cantidades en general corresponden a un adeudo o son muy bajas en relación a lo que piden los auténticos criminales, tanto en el secuestro como autosecuestro impera la motivación económica.
foto.Archivo