Un siglo por la paz
I
La información médica un derecho
Oaxaca, Oax. 14 de marzo 2011 (Quadratín).- La comunicación entre médico y paciente es un proceso fundamental que influirá determinantemente en la adaptación a la enfermedad y al apego a los tratamientos.
La información médica es un derecho del paciente que está fundamentado en los Artículos 29 y 30 del Reglamento de la Ley General de Salud en materia de prestación de servicios de atención médica, que a la letra dice: La paciente o el paciente o en su caso el responsable, tienen derecho a que el médico tratante les brinde información completa, clara, oportuna y veraz sobre su diagnóstico, pronóstico y tratamiento
.
Sin embargo, en el mundo de la oncología, aunque existen avances y se informa cada vez más al paciente de manera empática sobre su enfermedad, en ocasiones los médicos no brindan información suficiente y clara, intentando proteger al paciente del dolor que puede generar un diagnóstico de cáncer.
Otras veces es la misma familia quien pide que se le oculte la información al paciente, utilizando argumentos como: No queremos que sufra. La noticia lo va deprimir. Es mejor que no sepa, etc.
En un principio la noticia puede ser atemorizante para la persona, sin embargo, más a mediano plazo la información acerca de su enfermedad y tratamientos aumenta la satisfacción, favorece la adherencia al tratamiento, fomenta la toma de decisiones compartidas, mejora su adaptación a la realidad y su calidad de vida.
La desinformación médica se favorece más en pacientes que no conocen sus derechos, un ejemplo claro es la población indígena, monolingüe, con bajo nivel educativo y económico, que no entiende su enfermedad, percibiendo el mundo médico como atemorizante, colocándolo en una posición de alta vulnerabilidad.
En Oaxaca un gran porcentaje de los pacientes con cáncer son indígenas y poseen las características anteriores, en estos casos desafortunadamente la relación médico-paciente no siempre es la ideal.
Cómo psico-oncóloga he detectado que para lograr una mejor adaptación a la enfermedad y a los tratamientos, una de las principales barreras en esta población es la poca información y la relación médico paciente.
Con respecto al trato médico, éste en ocasiones considera que el paciente no entenderá sus explicaciones por tener un bajo nivel educativo y ser monolingüe (quien generalmente traduce es un familiar), por lo que la información que brinda suele ser pobre , además de que hay una notoria falta de sensibilidad ante el sufrimiento y desconcierto del paciente .
En muchos casos el médico asume el papel de juez, culpabilizando al paciente por haber acudido tardíamente a consulta en estado avanzado de la enfermedad, sin tomar en cuenta que esta falta de participación preventiva se debe también a fallas en el mismo sistema de salud.
En esto podemos especificar que el sistema preventivo no ha sido del todo sensible para detectar las necesidades de esta población como: la dificultad en el acceso a los estudios preventivos, la falta de recursos para transportarse, aspectos culturales (vergüenza de exponer el cuerpo a un médico, la cosmovisión) y los mitos alrededor del cáncer.
A eso hay que agregar que en el sistema de salud el tiempo de consulta es muy breve y el paciente no se atreve a plantear sus dudas, pues percibe al especialista como una figura de autoridad, no empática y fría.
II
Recomendaciones
Es evidente que el sector indígena con cáncer es altamente vulnerable y requiere una mejor atención y un trato digno por parte de los especialistas. Se sugiere sensibilizar a la población médica de las necesidades específicas de este grupo para lograr una mejor relación médico paciente, lo cual generará una mayor colaboración y un menor sufrimiento de este último.
Es importante tomar en cuenta la necesidad evidente de contar con traductores en lenguas indígenas en los centros oncológicos, particularmente en la consulta donde se explicará la naturaleza de la enfermedad y las características de los tratamientos que requerirá. Esto ayudará a generar confianza en el paciente al sentirse comprendido en su lengua materna.
Hay que tomar en cuenta que la relación médico paciente es un proceso en el cual se recomienda ir monitoreando las necesidades y dudas de cada paciente, se sugiere que el especialista se asegure de que la información brindada sea correctamente interpretada.
Finalmente no hay que olvidar que el paciente es un ser humano que sufre y no por su condición de indígena merece una mala atención médica, puesto que se caería en una actitud discriminatoria.