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Oaxaca, Oax. 26 de enero de 2011 (Quadratín).- De no intervenir el Comité Ejecutivo Nacional, el PRI de Oaxaca perdería los 600 mil votos que obtuvieron en la pasada elección, consideró el Frente Renovador por un PRI para Todos, corriente que aglutina a un sector inconforme con su Comité Directivo Estatal.
Roberto Villalana Castillejos, integrantes de esta expresión, consideró que la dirigencia que encabeza el candidato perdedor a la gubernatura Eviel Pérez Magaña, ha dado cobijo a ex colaboradores del ex gobernador Ulises Ruiz Ortiz, acusados de corrupción y abusos durante el sexenio pasado.
En su opinión, estos sujetos desde el gobierno traicionaron la confianza del pueblo y desde el partido nos llevaron a la derrota, ahora buscan quedarse en el partido porque no tienen ninguna posibilidad de seguir medrando con el poder en la administración de Gabino Cué.
Priista desde hace más de 28 años desempeñándose como delegado, coordinador de campañas, legislador, dirigente de sectores y en el Comité Directivo, Villalana Castillejos indicó que con cientos de militantes con el Frente Renovador iniciaron en Oaxaca el movimiento para cambiar la dirigencia estatal y ahora somos miles, porque se han sumado varias corrientes opositoras a la burbuja, como denominan al grupo ulicista atrincherado ahora en el PRI local.
Señaló que se tienen reuniones en las ocho regiones del estado con priistas que ven el riesgo de no poder dar al candidato presidencial de su partido los 600 mil votos ganados en julio del año pasado, en lo que será un proceso electoral difícil y se necesitará toda la fuerza del priismo nacional.
En Oaxaca vemos una dirigencia estatal endeble, sumisa, sin posicionamientos para defender causas sociales, sin argumentos para exigir a la oposición un buen gobierno, identificada con corrupción, abuso y compadrazgos, dijo Villalana Castillejos.
Urgió a su dirigencia nacional, que preside Beatriz Paredes, y al presidente electo, Humberto Moreira, atender Oaxaca, ya que cómo vamos a ganar el 2012 si estamos divididos.