Por un año de paz, concordia y realizaciones colectivas

Oaxaca, Oax 31 de diciembre de 2010 (Quadratín).- Al término de la sesión ordinaria de este jueves de la LXI Legislatura, Martín Vásquez Villanueva se congratuló de los trabajos de ésta que es la legislatura más plural de la historia de Oaxaca, la primera donde ningún partido tiene mayoría absoluta, y aprovechó para desearles a los legisladores de todos los partidos un año 2011 pleno de armonía, paz y realizaciones personales y colectivas.
Es oportuno recordar, dijo, que “antes que abanderar la plataforma de un partido o los anhelos legítimos de un distrito, somos también padres de familia, somos hijos, somos amigos, somos oaxaqueños que queremos lo mejor para nuestro entorno inmediato, nuestro hogar, y queremos lo mejor para nuestra casa compartida, que es Oaxaca”.
En ese sentido, totalmente ajeno a la política que es en su propia dimensión una de las más elevadas responsabilidades humanas, es que “deseo lo mejor para ustedes, para su familia, para los seres que más quieren, y que sus proyectos para el año próximo aterricen en los mejores términos, los de más satisfacciones para ustedes y más impacto para su círculo de amistades y afectos”.
“Que la paz interior y la concordia exterior rijan no sólo el año nuevo sino los 365 días de un año pródigo en realizaciones individuales, familiares y colectivas”, puntualizó.
El presidente de la Junta de Coordinación Política también hizo un reconocimiento al ánimo constructivo que prevaleció en su responsabilidad constitucional como legisladores: “Las jornadas que hemos vivido en este primer tramo del camino han sido intensas, de mucho debate, de álgidas controversias, como corresponde a una legislatura plural, la más equilibrada en la historia de Oaxaca, pero ha imperado en todos los casos un espíritu de respeto a las convicciones, a las filiaciones y a las diferencias. Es a lo que yo llamo urbanidad política y democracia parlamentaria”.
También señaló la importancia que el diálogo franco y abierto tuvo para abrir rutas de avenimiento, de acuerdo transparente, y que la pluralidad no haya derivado en un simple cotejo de fuerzas y finalmente en parálisis legislativa, un escenario de perder, que sólo significa dilapidación de oportunidades y que no corresponde al mandato de los oaxaqueños.
Seguir en esa misma tónica el próximo año, exhortó Vásquez Villanueva, para contar en definitiva con el andamiaje jurídico e institucional que permita hacer frente a los crecientes retos de Oaxaca: “sólo la civilidad, el respeto de unos a otros, y la disposición a los grandes acuerdos nos permitirán construir la segunda etapa de la reforma del Estado”.