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Oaxaca, Oax. 12 de agosto de 2010 (Quadratín).-El Grupo Parlamentario del PAN en la LX Legislatura, rechazó el dictamen aprobado esta tarde por la mayoría priísta en el Congreso local mediante el cual se absuelve al gobernador Ulises Ruiz de violación de derechos humanos ocurrida durante los acontecimientos del 2006, dado a que su responsabilidad en estos hechos se encuentra plenamente establecida por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Durante su intervención en tribuna, la diputada de Acción Nacional, Perla Woolrich Fernández evidenció las irregularidades cometidas por la Comisión Instructora, encargada de llevar el procedimiento de juicio político, tales como la celeridad con que se dio curso a este procedimiento sin observar los términos que establece la ley para estos casos.
En este procedimiento que se realizó en 15 días, agregó, nunca existió una investigación real, el presidente de la Comisión Instructora tomó decisiones unilaterales durante todo el proceso, nunca se exhibieron documentos originales para la integración del expediente, ni los integrantes de dicha comisión de la cual forma parte- fueron convocados para analizar las pruebas y analizar el caso.
Precisó que la única ocasión en que fueron convocados, el presidente de dicha Comisión, el diputado priísta Etelberto Gómez Fuentes, se presentó con un dictamen a modo en el que se absolvía de toda responsabilidad al jefe del Ejecutivo, y se daba por concluido el procedimiento de juicio político, sin que existiera un análisis previo que precisamente diera pie al dictamen.
Por su parte, el coordinador de la bancada albiazul en la LX Legislatura, recalcó la responsabilidad por omisión de Ulises Ruiz, en la violación de los derechos humanos de los ciudadanos durante los hechos del 2006, misma que se corresponde con una resolución emitida por el Máximo Tribunal en el país a raíz de una investigación hecha en esta capital.
La responsabilidad de Ulises Ruiz puede verse con sólo echar un vistazo a las responsabilidades que establece la Ley de Responsabilidades de los Funcionarios Públicos. Ulises Ruiz es responsable dado que durante esos hechos, era el máximo encargado del gobierno de Oaxaca, y como tal, estaban a su cargo los funcionarios y las corporaciones policiales estatales.
Precisó que como mandatario, era su responsabilidad observar que las corporaciones policiacas, así como sus mandos, no cometieran actos excesivos, y observaran los derechos humanos de los manifestantes, así como de todo ciudadano.
Contrario a ello, agregó, Ruiz Ortiz no gobernó durante ese tiempo, no ejerció las atribuciones que le confiere la ley, por lo tanto, sí es responsable por omisión.
Al respecto, el diputado de la bancada panista, Alfredo Ahuja Pérez, ahondó en el tema al detallar que en declaraciones a un medio de comunicación nacional, la entonces procuradora de Justicia Estatal hoy auditora superior del estado-, afirmó que al enterarse de los excesos cometidos por los mandos policiales, los llamó a cuentas y se deslindó de su actuación.
Por lo tanto, puntualizó, al conocer Caña Cadeza sobre la actuación de las corporaciones policiales, la exime del desconocimiento de los hechos que esgrimen a fin de deslindarse de responsabilidades.
Con respecto a Ulises Ruiz, añadió, su responsabilidad es clara debido a que de sus corporaciones policiales provino la agresión que derivó en el movimiento del 2006.
En aquel entonces fungía yo como delegado de la Secretaría de Economía federal, y la dueña del Hotel Marqués del Valle en el zócalo capitalino-, con bauchers y registro de hospedaje en mano, vino a comprobarme cómo empleados del gobierno del estado se habían hospedado en su hotel la noche previa al intento de desalojo de los profesores del zócalo.
Mediante esos comprobantes se supo que esos sujetos habían consumido esa noche dos botellas de Tequila, y que fueron ellos mismos que desde sus habitaciones lanzaron gases lacrimógenos a los profesores, razón por la cual los maestros ingresaron al Hotel Marqués del Valle a buscar a sus agresores, reveló.
De igual forma, dijo, como delegado federal, fue testigo cómo el gobierno federal canalizó recursos a los comerciantes que resultaron afectados por el movimiento social de aquel año, pero que sin embargo fue usado por Ruiz Ortiz para premiar a aquellos empresarios que lo defendieron durante ese tiempo.
Ahúja Pérez afirmó que en la recta final de esta LX Legislatura, quedan muchas cosas en el tintero, sin embargo, lo que sí sabemos los oaxaqueños es que en Oaxaca hay necesidad de transformar muchas cosas, no solamente la ley, no solamente el gobierno, hay muchas cosas por hacer.
Por ello, llamó sus compañeros legisladores a ejercer su libertad de actuación en base a las necesidades primordiales de la ciudadanía oaxaqueña, ya que lo importante aquí, no es cambiar de dueño; lo importante aquí es dejar de ser perro.