Día 23. Por oportunismo, crisis en Ciencias Políticas de la UNAM
Oaxaca, Oax. 9 de febrero de 2010 (Quadratín).- El ambiente político está enrarecido y es incierto y todo el escenario político-electoral se plantea en dos bloques, por un lado el PAN, PRD, PT y Convergencia y por el otro el bloque oficial.
El bloque opositor en espera del sí, acepto, del Albiazul, que está llevando hasta el límite del tiempo su esperada participación condicionando su alianza. Y es en la persona de Gabino Cué en quien ha recaído el cumplimiento de sus condiciones, como por ejemplo el reconocimiento de Calderón como presiente de México, dejando en duda su convicción política frente a la legitimidad del que hasta hace unas semanas fue su presidente legítimo Andrés Manuel López.
En semanas pasadas se hablaba de seis aspirantes propuestos por los partidos coaligantes PAN, PRD, PT y Convergencia, de este último el propio Gabino Cué, sin embargo en entrevistas locales y nacionales éste ha manifestado ser ya no sólo el candidato si no el futuro gobernador de Oaxaca.
Dónde queda entonces el derecho de los demás frente a una ventajosa campaña del senador con licencia Gabino Cué y el espíritu democrático de éste frente al pueblo de Oaxaca. Ya es el candidato extraoficial o falta el proceso de preselección que demuestre su convicción democrática.
En cuanto a la alianza PRI-Verde, la figura de Eviel Pérez Magaña de pronto se ve desdibujada como el único y señalado candidato del PRI a la gubernatura ungido por el gobernador del estado, toda vez que la decisión que parecía inamovible se viene derrumbando frente a las acciones del trío dinamita encabezada mediáticamente por Hernández Fraguas, el senador Toledo Infanzón y Jorge Franco, en una campaña abiertamente inducida hacia todos los sectores del PRI en el estado, donde pretenden posicionarse con la fuerza de las encuestas y las reuniones con dirigentes de su propio partido y de los partidos de oposición.
Las dos figuras principales en este juego político del 2010, Gabino y Eviel se ven tambaleantes. El primero por sus propias declaraciones incongruentes frente a una oposición que de palabra enarbola la democracia y en los hechos asume una imposición unilateral que descalifica a los demás actores de este escenario, y Eviel que se manifiesta débil y sin una posición propia fortalecida que se confronta con los que argumentan trayectoria política, derechos partidarios e incluso favores al jefe político.
A menos de un mes de iniciar los plazo legales-electorales, los propios actores políticos inmersos en los partidos llamados de oposición y los oficialistas navegan en aguas turbias en espera de refrendar las decisiones unipersonales de dos personajes, o bien, impactarlas utilizando diversas maniobras – no todas limpias – para lograr acceder al poder en procesos que pudieran dar oportunidad a expresiones descalificatorias.
En espera de llegar a consensos incluyentes y democráticos que se impulsen desde las instancias partidarias, con tolerancia y verdadero interés político de lograr triunfos electorales, basados en proyectos de gobierno que impulsen el desarrollo económico y social de nuestra entidad, hacia la renovación de presidencias municipales, congreso local y gubernatura del estado, dando la misma importancia en las tres elecciones y retirando el trato de lacayismo y sumisión a los que hasta hoy parecieran ser considerados como pro-hombres.
Observemos con reserva, revisando proyectos y propuestas, con la razón que nos da ser hombres y mujeres libres.
* Regidora de Equidad y Género del Municipio de Oaxaca de Juárez