Feria del libro de Guadalajara
Oaxaca, Oax., 11 de agosto de 2009 (Quadratín).- Hace apenas algunos días el Partido de la Revolución Democrática anunciaba la realización de su consejo nacional, los críticos de estado anunciaban desde la expulsión de Andrés Manuel Hasta la renuncia de Jesús Ortega.
Los menos se referían a un posible acuerdo para anunciar al coordinador de los diputados en el Congreso Federal.
Otros más optimistas hablaban de una refundación del partido para poder encarar el proceso electoral del 2012.
Nada de eso pasó, por el contrario quedó de manifiesto que los múltiples intereses, todos ellos de carácter económico, están por encima de cualquier intento de renovar y fortalecer a ese instituto político.
Y de ser necesario están convencidos de llevar al límite de la fractura al partido si no se privilegia a las tribus.
Esta vez fueron los mismos chuchos quienes exhibieron sus diferencias ya que durante el discurso del ególatra mayor y presidente del PRD, en el que como una pose, anunciaba su cabeza para ser nota en los medios, sus aliados del autodenominado Grupo Social Demócrata de la mano de René Arce, Ruth Zavaleta y Víctor Hugo Círigo no se cansaban de vociferar vituperios y exigirle la renuncia al presidente de su partido y contrario al discurso de refundación, este grupo no sólo solicitó la expulsión de Andrés Manuel, sino también de Marcelo Ebrard y Clara Brugada, entre otros.
Así, sin acuerdos de ningún tipo quedó de manifiesto una vez más que el Partido de la Revolución Democrática va a un despeñadero pues no cuenta con una dirección nacional que pueda aglutinar y convencer a las tribus.
Los que tenían sus dudas sobre deslindarse ya de ese partido de izquierda, poco a poco se han ido convenciendo, los que no, falta poco para que lo hagan pues lo que se avecina en nada va a gustar a los intelectuales, artistas, críticos e izquierdistas de corazón pues en su afán de seguir conservando prebendas y continuar la luna de miel con el chaparrito de lentes se avizora desde ahorita una alianza que sorprenderá a propios y extraños, nos referimos a la alianza PAN PRD en el senado, de la mano de otro alfil de Jesús Ortega, Carlos Navarrete, quien ha manifestado en algunas reuniones en corto, que por el bien del país es necesario este tipo de acuerdos vergonzantes para frenar a la aplanadora PRI PVEM.
Una vez que se ha decidido su permanencia al frente de la Coordinación del Senado y abriendo la posibilidad a Alejandro Encinas de coordinar a los diputados, Carlos Navarrete ya teje acuerdos para la alianza que viene.