Garantiza TEPJF alternancia de género en el PAN
Roberto Molina / Quadratín
Oaxaca, Oax. 19 de junio de 2009 (Quadratín).- Hace algunos días el movimiento nacional que encabeza Andrés Manuel López Obrador sufrió una nueva embestida que se orquestó desde Los Pinos y para llevarla a cabo utilizaron a su bufón favorito Jesús Ortega, además del tristemente célebre Tribunal Federal Electoral.
El objetivo era terminar con el bastión más grande del obradorismo en el país, Iztapalapa. En esta delegación en las elecciones internas, Clara Brugada había obtenido más de 80,000 mil votos. Fiel a su costumbre, la elección vivió momentos muy tensos pues el reparto de despensas, cemento y dinero pusieron a los chuchos en la pelea por la delegación.
Sin embargo al final del recuento la conciencia popular se había impuesto a lo más sucio y bajo del chuchismo, motivo por el cual Jesús ortega acudió con sus amigos calderonistas y le dieron el visto bueno para recurrir a los tribunales. Ahí, como ya se está volviendo una costumbre en este país, imperó la orden de las mafias y decidieron a unos días de las elecciones anular la candidatura de Clara Brugada y dársela a Silvia Oliva.
El problema es que las boletas van a decir Clara Brugada, y si la gente votara por ella estaría votando por la candidata de la alianza Chuchos-Pan.
De inmediato en el cuartel de guerra de Andrés Manuel se tenía que tomar una decisión. Clara Brugada, disciplinada consideró que había que luchar hasta lo último para no ceder esta delegación a los Chuchos y al PAN.
Como una medida desesperada consultaron con la dirigencia del PT y acordaron llevarle los votos a Rafael Acosta alías Juanito, quien consiente de que no tenía posibilidades de ganar la elección, se comprometió a renunciar en cuanto se gane la delegación para dejar la responsabilidad en la Asamblea Legislativa y en Marcelo Ebrard, decisión que terminaría con el nombramiento de Clara Brugada como Jefa Delegacional.
Así, con esta estrategia maestra de Andrés Manuel, los Chuchos y el panismo se vieron maniatados, sin embargo Clara Brugada está consiente de que para ganar esta elección se requiere de algo más que ganas, es una tarea titánica enfrentar a las fuerzas facciosas del Chuchismo y el panismo, es la versión moderna de la batalla de David contra Goliat.
En su contra, Clara Brugada tendrá a los medios impresos y televisivos, quienes dicho sea de paso han puesto sobre la mesa que los que mandan en esta país son ellos y que el IFE, y el TRIFE sólo son empleados a su servicio, al menos así lo han demostrado al violentar la ley una y otra vez. De hecho, un día después de diseñada la estrategia, los medios cedieron primeras planas y tiempo de televisión a su bufón favorito, quién llama traidor a Andrés Manuel. Sin embargo, esta embestida de los medios no hizo mella en la intención de la gente de rescatar el triunfo en Iztapalapa.
Faltan capítulos pendientes de esta historieta, por lo pronto las fuerzas vivas de la izquierda tendrán que librar una guerra sin cuartel a ras de suelo, cuerpo a cuerpo y sobre todo aérea con la televisión.
Se tendrán que tocar todas y cada una de las puertas para despertar la conciencia en los ciudadanos, mientras que del lado de los Chuchos, consientes del ridículo que van a hacer el día de la elección, hoy llaman a su gente a votar por el PAN.
El pueblo de Iztapalapa decidirá en las urnas, o vota por la coalición Jesús Ortega PAN o vota en contra de ellos cruzando el círculo del PT.