Celebran al Señor del Rayo en la ciudad de Oaxaca
OAXACA, Oax. 30 de diciembre de 2013 (Quadratín).-A unas horas de la celebración del nuevo año, dos de las tradiciones más populares durante la cena de fin de año, son las uvas de los doce deseos y la compra de ropa interior en color rojo.
Varios comerciantes de mercados y tianguis de la capital de Oaxaca aseguraron que debido a su demanda, el precio tanto de la fruta como de las prendas aumentó hasta un cien por ciento.
En una visita a los mercados “Benito Juárez” y de “Abasto”, ubicados en esta capital, se comprobó que el kilo de uva ha comenzado a venderse hasta en 40 pesos.
Comenta Inocencio Pérez, propietario de un local de frutas y verduras que durante estas dos semanas “es de ley que su costo se dispare al doble”.
Para el comerciante, el aumento del precio de la uva se debe a que gran parte de la fruta que se vende en esta temporada es de importación, por lo que la caja de ocho kilos puede llegar a costar hasta 700 pesos o más dependiendo de la calidad.
“No es que uno la quiera dar cara, sino que en la misma central de abasto su precio está por las nubes”, dijo.
No obstante, Inocencio Pérez aseguró que hasta hace unos años, “cuando la uva costaba menos de 20 pesos el kilo, la gente compraba hasta cuatro o cinco kilos, pero desde el año pasado, las ventas se vinieron para abajo: nosotros también hemos batallado a la hora de vender nuestro producto”, puntualizó.
Mientras tanto el precio del kilogramo de pollo también reportó un alza en el precio.
En tanto, la venta de lencería en color rojo y amarillo los precios varían dependiendo del modelo y el lugar en donde se adquieran, pero los hay en los puestos ambulantes de los mercados desde 12.90 pesos.
Muchas personas, en su mayoría mujeres, acuden a las diversas tiendas a conseguir calzones rojos para que en el año nuevo, no les falte el amor y los calzones amarillos para que no les falte el dinero.
La tradición reza que inclusive si no se cuenta con calzones rojos nuevos, se puede amarrar un listón rojo debajo de la cintura, que cumple el mismo propósito.
Para el caso del dinero o que en el año nuevo se dé la prosperidad económica, si no se cuenta con los famosos calzones, se puede usar una moneda en el zapato o de preferencia un billete en un bolsillo.
Debido a esta tradición, en los aparadores de algunas tiendas se pueden apreciar la ropa interior para mujer, sin embargo, la de hombre también empieza a ser requerida y debido a esto, ofertada.