Los fantasmas de Toño Malpica llegan a la FILO
OAXACA, Oax. 10 de marzo de 2014 (Quadratín).-El ballet Ruso de Viktor Korolkov se presentó este domingo en el teatro Macedonio Alcalá, ante la mirada fascinada de familias enteras que se dieron cita para ver la historia de amor de Sigfrido y Odette, quienes a lado de más de 30 bailarines en escena rompieron el sortilegio que los mantenía separados.
Con un despliegue de bailarines que acto tras acto se desenvolvía con naturalidad y cadencia, los oaxaqueños quedaron embrujados con la interpretación del clásico de Tchaikovsky, el Lago de los Cisnes.
Bondad y maldad, dos palabras que resumen la historia de Sigfrido y Odette, quienes a pesar de los engaños de Rothbart, logran salir victoriosos de las adversidades para jurarse amor eterno y terminar con el hechizo.
Así, la eterna lucha del bien contra el mal se integró en cada movimiento sigiloso del cisne blanco con su pureza y del cisne negro con su ambición.
La técnica y sincronía de los bailarines despertaron grandes expresiones de emoción y asombro entre los asistentes, principalmente en los niños y niñas quienes se maravillaron con los movimientos de la compañía de ballet.
La euforia no se hizo esperar al término de todos los actos y de cada función, que sin duda fue una muestra de reconocimiento al talento de esta grandiosa compañía de ballet.
Con más de una tonelada de escenografía, maquillaje y vestuario, los bailarines surgidos de las más importantes escuelas de ballet en Rusia y en esta ocasión la participación de los primeros solistas del ballet nacional de Kiev; Denys Nedak y Natalia Matsak, dieron vida al Lago de los Cisnes.