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MÉXICO, DF. 11 de septiembre de 2014 (Quadratín).-Luego de haber sobrecalentado la plaza veracruzana, ahora viene la resaca para Miguel Ángel Yunes Linares.
Las revelaciones de las declaraciones en los EU del narco Francisco Pancho Colorado Cessa podrían reabrir la campaña y el financiamiento oscuro a Yunes como candidato del PAN al gobierno del estado.
Las redes de poder del narcotráfico en Veracruz han involucrado a Yunes como el enlace con el grupo de Pancho Colorado y Los Zetas. Como candidato panista en el 2010, Yunes colocó a miembros del grupo de Colorado en posiciones políticas: Miguel Colorado Cessa, hermano de Pancho, fue candidato a diputado federal por el PAN empujado por Yunes.
De acuerdo con los primeros indicios, algunas de las declaraciones en los Estados Unidos de Pancho Colorado –arrestado por usar la venta de caballos como forma de lavado de dinero del narco– ya contienen referencias a Yunes Linares, quien ha comenzado a adelantar vísperas y a presionar al PAN de Gustavo Madero para entregarle desde ahora la candidatura a gobernador que se resolverá en el 2017 como una forma de obtener fuero político.
Pero en algunos círculos nacionales del PAN han prendido los focos de alerta por las relaciones peligrosas de Yunes porque sólo les ha compartido pasivos y no activos.
La candidatura a gobernador se la entregó el presidente Calderón luego de una reunión en la que el veracruzano aceptó el triste papel del payaso de las cachetadas al permitir que Calderón estrellara el rostro de Yunes, director entonces del ISSSTE, en el pastel de aniversario de la institución. Como si fuera circo, los asistentes rieron de burla ante el rostro risueño y empastelado de Yunes.
Derrotado en el 2010, Yunes quiere regresar en el 2017. Pero el PAN veracruzano ya no es el mismo: Yunes apoyó a Madero en la elección interna y perdió. Y hace apenas dos semanas, el 24 de agosto, Yunes fracasó en la elección de consejeros estatales del PAN; pues su grupo apenas pudo conseguir cinco lugares de los cien en disputa.
El actual dirigente estatal del PAN, Enrique Cambranis, fue acosado por Yunes con acusaciones sin fundamento sólo para ensuciar la elección.
Sin el apoyo del panismo estatal, con malas cuentas con Madero y con una biografía política llena de sospechas, además del papel de acosador de políticos cuando gobernó Veracruz en nombre de Patricio Chirinos, uno de los diezhombres del salinismo que fue el gobernador pero le dejó la operación a Yunes, ahora Yunes quiere otra vez la candidatura a gobernador.
Sólo que le falta por aclarar algunas otras relaciones de poder. Por ejemplo, su alianza y complicidad con el ex gobernador Fidel Herrera Beltrán –por cierto, también en el expediente relacionado con Pancho Colorado– desde los años ochenta cuando pactaron posiciones en sus respectivas oficinas públicas para recomendados de uno y otro. Esa historia llevó a asuntos sentimentales con la recomendada de Yunes, importantes sólo por los efectos políticos, que llevaron a Yunes a una ruptura de relaciones políticas con Herrera.
Con expedientes abiertos en varios asuntos políticos y de poder, Yunes tendrá que encarar las declaraciones de Pancho Colorado que algunas fuentes judiciales afirman que son incriminatorias sobre el financiamiento de la campaña de Yunes como candidato panista a la gubernatura.
Por lo pronto, en declaraciones públicas cuando fue arrestado Pancho Colorado, Yunes reveló que el de las relaciones con el narco era Fidel Herrera Beltrán como gobernador de Veracruz, aunque más con la intención de alejar la investigaciones de sí mismo.
Lo que queda por saber es la decisión del PAN de Madero: si paga favores incumplidos y si el PAN repite en Veracruz con el candidato de Calderón y su vinculación con expedientes del crimen organizado.
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@carlosramirezh