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OAXACA, Oax. 5 de noviembre de 2014.- El paludismo es una infección provocada por un parásito unicelular que se aloja en la sangre a través de la picadura del mosquito Anopheles. Los síntomas del paludismo se manifiestan a partir del sexto u octavo día, después de la picadura de un mosquito infectado.
El coordinador de Información y Análisis Estadísticos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Miguel Ángel Altuzar Figueroa, explicó que los principales síntomas del paludismo son fiebre alta, sudoración excesiva, fatiga, dolor de cabeza, dolor muscular, náuseas y vómito.
Sin embargo de no tratarse, el cuadro puede evolucionar a formas graves con manifestaciones de encefalopatía aguda, anemia grave, ictericia e insuficiencia renal.
De igual forma Altuzar Figueroa explicó que en Oaxaca el panorama epidemiológico refleja una tendencia descendente y a la fecha no se ha registrado caso alguno, pero hace un llamado de alerta a la población a prevenir esta enfermedad.
Abundó que esta reducción se debe al interés y esfuerzos coordinados del sector salud en materia de prevención, control y erradicación de focos de infección, ya que las medidas más eficaces para el control de esta enfermedad son las que se pueden realizar desde el hogar manteniendo entornos y viviendas saludables e higiénicas, sin charcos en los alrededores, además de un adecuado control larvario en las localidades donde este padecimiento es endémico.
Por ello exhorta a la población en general tomar medidas preventivas que ayuden a disminuir el riesgo de contagio, principalmente en niños, adultos mayores y mujeres embarazadas.
Recomendó mantener cerradas las habitaciones, especialmente durante la noche que es cuando los mosquitos tienen mayor actividad, y colocar mosquiteros en las ventanas.
Así como usar repelente contra insectos que se aplican directamente sobre la piel, excepto alrededor de la boca y ojos, con el fin de reducir el riesgo de contagio, indicó Altuzar Figueroa.