Depresión, causa de incapacidad: Servicios de Salud de Oaxaca

OAXACA, Oax. 21 de noviembre de 2014.-La presencia de antecedentes de depresión en el ámbito familiar cercano (padres y hermanos), incrementa en un 30 por ciento la probabilidad de sufrir esta alteración patológica del estado de ánimo.

En México el nueve por ciento de la población entre 18 y 65 años de edad presenta trastornos afectivos, de estos, el 7.8 por ciento corresponden a episodios de depresión mayor, con una tasa de 2.5 mujeres por cada varón.

De acuerdo con un comunicado, la coordinadora de Salud Mental de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), Erika Ruiz Santiago informó que este padecimiento ocupa la cuarta causa de incapacidad, la cual puede presentarse a lo largo de la vida; las edades más vulnerables alrededor de los 17, 32 y a partir de los 65 años de edad.

Explicó que la aparición y cronificación de la depresión se ha relacionado especialmente con un descenso de los niveles de serotonina a nivel de las uniones neuronales; y existe, además, un grupo de enfermedades estrechamente ligadas a su aparición, la mayoría de ellas relacionadas con alteraciones endocrinas: migraña, diabetes, hipertiroidismo, síndrome de Cushing, enfermedad de Adisson, amenorrea hiperprolactinémica.

Detalló que se ha registrado, un porcentaje significativamente mayor en mujeres, siendo el embarazo y posparto las etapas con mayor riesgo, debido a las alteraciones hormonales sufridas.

La especialista indicó que se consideran factores potenciadores de la aparición de este trastorno, situaciones de dependencia o consumo habitual de alcohol, tabaco o drogas, así como experiencias de violencia, entre otros.

Sostuvo que entre los síntomas se encuentran: ánimo decaído (prolongado), perdida o ausencia de interés por actividades anteriormente placenteras, falta de apetito, aumento de la capacidad de fatiga, poca vitalidad, alteraciones del sueño, aparición de lentitud en las funciones motoras o agitación, ausencia de apetito sexual, pensamientos de muerte o suicidio recurrentes.

El ejercicio diario y una comunicación abierta con la familia, son herramientas que coadyuvan a prevenir la depresión.