Cierran matriz del Monte de Piedad en Oaxaca
MÉXICO, DF, 1 de diciembre de 2015.- Desde el lunes por la tarde comenzó la llegada de personal de la Policía federal al estado de Guerrero, con la encomienda de proteger la integridad de los profesores y resguardar las instalaciones donde se realizará la evaluación de desempeño que aplicará el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE).
En un comunicado, se informó que las llegadas del avión 727 color azul marino con el emblema de la Policía federal en los costados han sido frecuentes y en esta aeronave han sido desplazados cientos de integrantes de la corporación equipados con escudos, toletes y protectores que incluye el equipo antimotín, a los aeropuertos de Acapulco y Chilpancingo.
Con el objetivo de garantizar la seguridad de los docentes y evitar que se registren incidentes que alteren la paz pública en el estado de Guerrero, también están siendo concentrados en esa entidad efectivos federales que desarrollaban tareas de seguridad en otros estados de la República, quienes están llegando por carretera en camionetas, patrullas y camiones de la corporación.
Mandos de la Policía federal consultados en el exterior del aeropuerto de Acapulco, refieren que la instrucción que han recibido consiste en actuar con apego a los derechos humanos y permitir la libre manifestación siempre y cuando no haya secuestro de unidades de transporte público, robo a establecimientos comerciales o privación ilegal de la libertad de profesores que si quieran presentarse a la evaluación la cual se realizará del 3 al 6 de diciembre.
Al respecto, recordaron el caso de un maestro que fue rapado u otra maestra que fue agredida y humillada en Chiapas en pasado 3 de julio por supuestos integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) cuando acudía a presentar un examen para ingresar al sistema educativo en esa entidad, a lo que dijeron que “esa escena no se va a permitir en Guerrero”
El operativo de la Policía federal se concentrará específicamente en Acapulco y Chilpancingo, aunque habrá presencia de los efectivos federales en todo el estado de Guerrero.