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MORELIA, Mich., 24 de septiembre de 2016.- El paradero del sacerdote de Puruándiro, José Alfredo López Guillén, sigue siendo un misterio.
Hay por lo menos cinco líneas de investigación, y dudas sin fin. Y lo único prácticamente seguro, virtualmente descartado, es que el prelado haya sido secuestrado.
Las pesquisas de Quadratín y las conjeturas de fuentes próximas a las investigaciones ministeriales sugieren que no existieron amenazas ni violencia en el entorno en que desapareció el cura.
A más de cien horas de su último avistamiento, testimonios y evidencias indican que el padre López Guillén conocía perfectamente a todas las personas con las que interactuó, e inclusive se ausentó por sus propios medios.
El cardenal Alberto Suárez Inda denunció que el párroco de Puruándiro fue secuestrado la noche del lunes por parte de un comando que irrumpió en la sede clerical, y también robó pertenencias de la víctima.
Las autoridades, empero, creen tener ya la certeza de que el sacerdote no fue objeto de un plagio, con base en múltiples argumentos científicos.
Este mismo sábado, Milenio Televisión reveló un nuevo video que supuestamente evidencia el momento exacto en que el cura ingresa a un habitación de hotel con un menor de edad.
Según testimonios, el sacerdote de Puruándiro entró y salió del referido establecimiento durante domingo, lunes y martes.
El misterio sigue…
Fuente: Quadratín Michoacán