Economía en sentido contrario: Banamex
CIUDAD DE MÉXICO, 21 de septiembre de 2017.- El futuro ya no es igual.
El terremoto del martes 19 de septiembre ha instalado nuevos parámetros.
Primero hablemos de un antecedente:
El domingo Miguel Ángel Mancera rindió su quinto informe, recibió loas de todos los partidos con excepción de Morena -nada anormal en el rey del no, Andrés Manuel López– y se fue a Nueva York a la Asamblea de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Viaje de 24 horas porque el martes quería estar en el homenaje a las víctimas del seísmo de 1985.
El lunes fugaz asistencia a la Reunión de Cambio Climático y regreso inmediato a la Ciudad de México.
Camino al aeropuerto un empresario le ofreció su avión.
-Gracias, amigo. Me voy por Interjet. Ya estoy en camino- contestó.
Así estuvo en la Plaza de la Constitución con Enrique Peña y presenció el izamiento de bandera y todo transcurría para un día normal, con agenda propia, cuando de repente la tierra soltó su furia y sus estragos y sus víctimas y el deterioro de una urbe herida por uno y muchos temblores.
Todo cambió por una orden natural.
La reconstrucción condiciona a Mancera
Ahora sí, a los elementos de la ecuación.
I.- ¿Qué hubiese pasado si Miguel Mancera acepta una de sus múltiples invitaciones a cenar en Nueva York y regresarse cómodamente en un vuelo privado al día siguiente?
Hoy estaría sacrificado en la leña verde de la crítica y sus posibilidades políticas canceladas por la irresponsabilidad en un martes tan crítico como crucial.
Ya no sería presidenciable.
II.- Mancera no es dueño de su agenda.
No puede irse de inmediato y dejar a una urbe herida, con llagas en el centro del rostro urbano y en el sur.
Tal vez no le dé para concluir la reconstrucción, porque llevará años, pero tampoco podrá irse a fines de octubre como era su deseo, so pena de ser acusado de irresponsable.
Y III.- Circunstancia similar tiene Ricardo Monreal.
Según su dicho, su delegación Cuauhtémoc es la de mayores estragos y por lo tanto deberá encarrilar las reparaciones antes de ir en pos de la Jefatura de Gobierno, seguramente con Acción Nacional (PAN), el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y escoltado por otras siglas.
Sin Mancera y Monreal la contienda por el país y la capital el año próximo sería pasto de los conocidos buitres en busca del poder desde hace 17 años.
Moreira: quiten a partidos y a reconstruir
1.- El gobernador coahuilenses Rubén Moreira ha hecho una propuesta: reformar de inmediato las leyes electorales, reducir 50 por ciento las prerrogativas a los partidos y destinar esos fondos -la mitad de 28 mil millones de pesos: 14 mil millones- a la reconstrucción de estados dañados por los sismos.
No 20 por ciento y sin cambiar la norma, como ofrece Andrés Manuel López para luego recibir el rechazo de los órganos electorales y recuperar el dinero de regreso.
Buena idea la de Moreira, pero parece sueño guajiro: los partidos están para llevarse nuestros impuestos, no para aportar.
2.- La desgracia ha unido a muchos sectores y bien haría Miguel Mancera en aceptar la oferta de presidente de la Cámara Nacional del Cemento, Mauricio Doenher.
Pone a disposición equipo para el rescate de víctimas, maquinaria para retirar escombros, asesoría para reparar y construir viviendas y cemento de todas las firmas: Cementos Chihuahua, Cementos Cruz Azul, Cementos Fortaleza, Cemex, Cementos Moctezuma y Lafarge-Holcim.
Hablar de volúmenes y compromisos motivaría a otras cámaras y en general al todo el sector privado a hacer lo mismo.
Y 3.- Otra vez las empresas de comunicación destacan por su cobertura y servicio social en el drama.
Cómo ignorar la transmisión para Televisa de Danielle Dithubide durante 20 horas seguidas y en vivo, siempre al mando de las conductoras Denise Maerker, Paola Rojas y Karla Iberia Sánchez?