
Periodistas del New York Times podrán utilizar IA de forma legal
OAXACA, Oax. 3 de diciembre de 2017.- En el espectro político nacional, aún faltan por ver algunas cosas en estas últimas semanas del 2017.
Por lo menos en la que termina, lo singular, no fue el anuncio del Partido Revolucionario Institucional (PRI) sobre la designación de su candidato a Presidente de la República, ni siquiera lo es, el manejo de la persona de José Antonio Meade o la estrategia de comunicación para la imagen del candidato, a quién lo empiezan a alejar de Peña Nieto y a diferencia del mandatario federal, lo están mostrando como un personaje capaz y letrado.
El verdadero acto que debemos analizar es otra inminente violación a la Constitución General de la República con lo que han dado en llamar Ley de Seguridad Interior (LSI).
¿Por qué? Simple y sencillamente porque con actos como esos se sigue probando que estamos en un Estado fallido, que la derecha es inhumana y que los poderes fácticos utilizan las instituciones y la ley a sus caprichos e intereses de clase.
El artículo 129 de nuestra Carta Magna establece con expresa precisión que “En tiempo de paz, ninguna autoridad militar puede ejercer más funciones que las que tengan exacta conexión con la disciplina militar. Solo así habrá́ Comandancias Militares fijas y permanentes en los castillos, fortalezas y almacenes que dependan inmediatamente del Gobierno de la Unión; o en los campamentos, cuarteles o depósitos que, fuera de las poblaciones, estableciere para la estación de las tropas”.
A esto hay que agregar que como garantía Constitucional, el ejército sólo en casos de excepción que cita el artículo 29 Constitucional podría salir de sus cuarteles, como coloquialmente se dice. Históricamente, en México el ejército ha sido utilizado por el Estado para reprimir y golpear movimientos sociales, esto lo ha hecho sin contemplaciones, hoy con esa Ley de lo que se trata es de darle “legalidad” al uso de la fuerza del ejército en las calles generando así un estado de excepción permitido desde la LSI.
Sigo sosteniendo que un Estado fallido como el actual régimen en México, está generando el endurecimiento de instituciones y creando leyes para que ante una eventual derrota electoral frente a la izquierda y, entendiendo que el sabotaje a un Gobierno no basta, prepara la legalidad para en su caso sea necesario recurrir a las armas. Incluso, justificarían que llegado el momento qué, ante la irreverencia a leyes e instituciones, el ejercito allí estará porque, los soldados si respetan la Constitución.
Sobre el uso del ejército para reprimir en México movimientos sociales, se han encargado de documentar y escribir, por ejemplo, en “Hotel Balmori” Francisco Pérez Arce; Elena Poniatowska en “La noche de Tlatelolco” y en “No den las gracias”; Carlos Montemayor en “Guerra en el Paraíso”. Poéticamente José Emilio Pacheco con “Las Voces de Tlatelolco” y sobre esto JAIME SABINES, dijo.
“A los tres días, el ejército era la víctima de los desalmados,
y el pueblo se aprestaba jubiloso
a celebrar las Olimpiadas, que darían gloria a México.”
En nuestro estado la discusión de la ley de movilidad está generando interés, hay iniciativas del sector de profesionales del derecho que realizan foros para revisar sus alcances.
Hay que tener cuidado, porque este tipo de Leyes justifican la teoría de Federico Engels en cuanto al origen de “La familia, la propiedad privada y el Estado”.
Por otro lado, comparto un comercial provechoso, la Doctora en derecho y autora de textos para los estudiosos del derecho, Blanca Salvador, impulsa trabajos de análisis sobre el “Sistema Acusatorio Adversarial, presente y Futuro” que se desarrollará el 11 de Diciembre en la Casa de Cultura Jurídica de Oaxaca leyes, en esta iniciativa participarán como ponentes y relatores Magistrados, jueces, litigantes y estudiosos del derecho de la gloriosa generación 1996-1991 de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de nuestra Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, deseo éxito a todos.