Que los libros regresen para que sean leídos por otros ojos: Rivera Garza
OAXACA, Oax., 14 de abril de 2020.- El divulgador de historia y escritor, Alejandro Rosas, charló este martes desde su biblioteca personal sobre las hazañas de Hernán Cortes, en el marco de la iniciativa #KeepReadingEnCasa, de Editorial Planeta.
Por medio de una transmisión en vivo, Alejandro Rosas habló sobre su libro Las Caras Ocultas de Hernán Cortés, donde relata las grandes hazañas de un hombre sediento de poder, riqueza y gloria.
Como parte de las charlas virtuales de Planeta de Libros México, Alejandro Rosas se enlazó con sus seguidores y amantes de la lectura, a quienes trató de aligerar el encierro voluntario derivado del Covid 19.
“Estamos viviendo un oasis histórico, pero yo digo que la peor pandemia que hemos vivido es la de la influencia española en 1518 dónde se registraron 50 millones de muertos en el mundo, en México fueron cerca de 500 mil en octubre fe 1518”, indicó.
Alejandro Rosas consideró que el momento actual es histórico e inédito porque nunca había sucedido que todo el mundo se encerrara al mismo tiempo en la historia, «evidentemente la diferencia es que las noticias no corrían como ahora, no había inmediatez».
Así, al incursionar sobre su libro, el autor detalló que Cortés es una producción posterior a la serie televisa Hernán Cortés, en la cual relata diversas facetas del conquistador y lo sucedido después de su muerte.
Ahí también plasma su íntima relación con Malintzin, y la simpatía peculiar entre él y Moctezuma, el respeto que siempre mostró por las tierras mexicanas y sus habitantes.
Pero más allá recordó que se detalla sobre un Hernán Cortés a quien nadie quería y todo mundo quería deshacerse de él, desde que murió en 1547 y cuyos restos se encuentran en la Iglesia del hospital de Jesús»
“Tuvo 10 entierros y 9 exhumaciones, además se tuvo la idea de que los mexicanos le tenían cierto temo”, dijo.
Precisó que a partir de la Independencia en 1821, pasaron 15 años para que España lo reconociera y cuando finalmente lo hizo en 1836, se trató de una burla.
En otro pasaje de su libro habló sobre Lucas Alamán, entonces fundador del conservadurismo en México, encargado de los restos de Hernán Cortés y quién los escondió cuando una turba de mexicanos pretendía desenterrarlos y quemarlos.
Fue en 1946 encontraron los escritos de Lucas Alamán y fue cuando hallaron la urna de oro terciopelo con unos restos envueltos, los guardaron y los dejaron ahí porque no se le iba a dar lugar al gran invasor.