Diferencias entre un estúpido y un idiota
CIUDAD DE MÉXICO, 11 de septiembre de 2020.- Cuando David León le entregaba bolsas de papel de estraza con dinero en efectivo a Pío López Obrador, no pude dejar de recordar alguna escena de El Padrino, sobre todo cuando León le dijo a López Obrador (el malo) que no olvidara anotar en su Biblia, que llevaba a todos lados, esa entrega, parte de las que realizaba desde hacía al menos año y medio. Dinero sucio “para la causa” disfrazada de “aportaciones”, como las que se le entregaban a Capone y su Sindicato del Crimen.
Esto nos explicaría por qué la semana pasada declararon intempestivamente la desaparición del municipio de Macuspana, sí, el terruño del Peje, luego de que fueran cesados por el Congreso del estado el presidente municipal (de Morena) y los 11 síndicos municipales, entre ellos Concepción Falcón Montijo, esposa de Ramiro López Obrador (sí, como lo imagina, otro hermano de YSQ). Falcón Montijo, la cuñada presidencial, es sospechosa por la malversación de al menos 200 de 355 millones de pesos desaparecidos de las arcas municipales. ¿Los encontraremos en La Biblia como aportaciones al movimiento?
¿Qué marca el protocolo en estos casos? ¿Qué se hace? ¿Una investigación?, ¿Se detiene a los sospechosos mientras se investiga?, ¿Se les envía al sexto piso del hospital Ángeles del Pedregal para curarlos de alguna descuidada esofaguitis?, ¿La UIF, tan efectiva contra opositores del presidente, congela sus cuentas? No, nada de eso. Desde el famoso rancho chiapaneco se decide desaparecer el municipio. Pío reaparece en Palenque, no al tercer día, sino dos semanas después de su estreno nacional en video, para aplaudir al Hermano Presidente que se mofaba de Calderón. Sí, el mismo Pío, y seguro que también la cuñada presidencial y Ramiro, todos juntos en la finca presidencial, que cada día se parece más a Manga de Clavo, la otrora famosa hacienda presidencial donde se refugiaba Santa Anna, en Veracruz, cuando quería privacidad para decidir el destino de la nación.
Yo, que ya escribí que soy sospechoso por naturaleza, pienso mal en estos casos, y el silencio oficial me permite pensar que en la Biblia del consiglieri podría haber incluso dinero de al menos un par de cárteles, con los que negociaba el subsecretario Peralta, a quien le acaban de desaparecer su subsecretaría luego de que lo agarraran con los dedos en la puerta en una serie de acusaciones que van de corrupción a su paso por Aduanas (fue el primero de tres que van en el puesto en menos de dos años), conflicto de interés, cobro de piso a los casineros y otras linduras a las que nos empiezan a acostumbrar los funcionarios de la 4T. Sólo que los cohetes les empiezan a explotar entre las manos.
¿Entonces, otra vez, qué se hace? ¿Se le llama a cuentas, se abren expedientes, se le congelan sus cuentas? No, eso es para los conservadores. A los amigos, cuando mucho se les desaparece el puesto y se apuesta al olvido. YSQ no ha vuelto a mencionar a Pío, ni a David López, su funcionario estrella, al que llamaba tras los temblores, y acusa campañas de sus opositores para tratar de ocultar la podredumbre bajo la alfombra de Palacio. Pero apesta.
Y pensaba también en otro orgullo de la 4T, el señor Castelán, sí el de la Sosa Nostra, su operador consentido en Hidalgo, donde lo llenó de diputaciones y presidencias municipales, incluidas las que se decidirán este octubre, en pago a sus servicios, me permito suponer, y a su honradez, tan cara a este gobierno, y en las 78 denuncias que se han levantado contra sus superdelegados, por lavado de dinero y otros delitos que son ya la marca de la Nueva Mafia del Poder. Por eso me muero por conocer esa Biblia. Versículo a versículo, como le gusta al Peje. Porque lo que es seguro es que no nos los recitará en las mañaneras.