Detienen en Chiapas al presunto asesino del padre Marcelo
ACAPULCO, Gro., 19 de septiembre de 2020.- María Magdalena Díaz Corros libró la muerte pero quedó con las dos piernas quebradas y con múltiples golpes en el cuerpo. Fue víctima de la pipa que se estrelló frente a su vehículo en la avenida Escénica el 14 de septiembre.
Magdalena pidió a las autoridades justicia, pues reveló que el chofer responsable fue dejado en libertad, mientras ella y sus familiares tienen una deuda superior a los 200 mil pesos por gastos médicos.
En entrevista a reporteros en la habitación del hospital privado Farallón donde se encuentra internada, señaló que ni Petróleos Mexicanos (Pemex) ni la empresa Simsa, dueña de la pipa que provocó el accidente, se han hecho cargo de la situación a pesar de que estuvo al borde de la muerte durante este percance. Con ambas piernas vendadas por las cirugías que le aplicaron de urgencia, María Magdalena relató lo sucedido la tarde del pasado lunes, mientras ella circulaba en su vehículo con dirección a su casa luego de su jornada de trabajo, hasta que por el puente elevado se estrelló contra la pipa de combustible de frente con ella.
“Vi cómo de frente el carro saltó el muro de contención, en lugar de girar el volante hacía donde el chofer pudiera hacer algo, pues me arrastró hasta el siguiente muro; estuve todo el tiempo consciente, el chofer de la pipa quiso irse, yo le supliqué que no se fuera, que no me dejara sola, alguien lo detuvo, la gasolina de la pipa me estaba cayendo sobre mi cuerpo”, dijo con lágrimas en sus ojos.
Sigan leyendo aquí: Quadratín Guerrero