Día 23. Por oportunismo, crisis en Ciencias Políticas de la UNAM
OAXACA, Oax. 31 de diciembre de 2020.- En este último día del muy complejo, difícil y extraño 2020, abordaré un tema muy relevante para quien escribe esto, el cual considero, lo es o debe ser también, para toda la humanidad: la gratitud…
Gratitud a Dios, a la vida, a mis padres, la familia, amistades de la vida, ahora particularmente a quienes se dedican a la medicina, así como a mis queridas coterráneas y coterráneos…
Gratitud por poder seguir sirviendo a los oaxaqueños desde la máxima tribuna de mi estado; por permitirme brindar opciones ocupacionales para mis paisanos jóvenes, y a mujeres y hombres cabezas de familia; y especialmente, por ser una mujer afortunada que padeció Covid 19 y, con la bendición del Gran Creador, puede continuar al frente de su familia.
La gratitud es una palabra que debemos mencionar todos los días; en la vida de una servidora ha estado presente religiosamente así como por hábito y tradición familiar.
Aun cuando es un tema que por siglos fue considerado una actitud personal, es importante revisarla con una perspectiva más amplia.
El significado básico de la palabra agradecimiento se refiere a este como un sentimiento, emoción o actitud que reconoce un beneficio recibido o que se recibirá.
Este concepto e idea ha sido central en la religión, pero también ha sido estudiada por la filosofía y otras ciencias.
Hace apenas dos décadas comenzó a ser revisada por la psicología, cuyos estudios resultantes deducen que la espiritualidad genera en las personas un mayor sentido de gratitud en todos los ámbitos de la vida.
En los últimos dos o tres años se han publicado un gran número de estudios y análisis donde se sustenta que las personas con un mayor nivel de bienestar subjetivo, son más agradecidas. Es decir, una persona agradecida, es más feliz, se deprime y estresa menos, está más satisfecha con su vida y con sus vínculos sociales.
Estos estudios concluyen que las personas agradecidas:
1. Controlan mejor su circunstancia, su crecimiento personal, sus propósitos, y autoaceptación.
2. Tienen una mejor actitud y estrategias para lidiar con la adversidad, para buscar ayuda, y para re interpretar y aprender de la experiencia.
3. Evitan eludir o negar los problemas o generar auto culpas, y las enfrentan sin necesidad de sustancias tóxico-adictivas.
4. Alcanzan un mejor sueño (posiblemente porque adolecen de menos pensamientos negativos), y adquieren una mayor capacidad de adaptación al cambio.
5. Tienden al altruismo, a la generosidad económica, a ser más amables y empáticos con sus congéneres.
Sin duda, hay otras emociones y rasgos humanos importantes para lograr el bienestar de las personas; sin embargo, lo anterior muestra que la gratitud tiene una importancia excepcional para los humanos y para su desarrollo emocional y personal.
Entonces, la gratitud está más relacionada con la salud mental y el bienestar que cualquier otra característica humana.
Pues bien, siendo la gratitud un factor determinante para el bienestar de toda persona, ahora que culmina este inédito 2020, es muy importante que las oaxaqueñas y oaxaqueños seamos agradecidos con el Gran Creador, con la vida o con el universo:
Esta noche en la que termina este catastrófico año, así como durante el primer día del anhelado año nuevo, les pido:
Mirar al cielo, orar y agradecer por todos… Por quienes estamos vivos… Por quienes nos dejaron… Por quienes llevarán una velada difícil… Por los nuestros…
Los conmino a dar gracias al Creador por la salud, por los alimentos, por seguir de pié, por avecindar este mundo, por la humanidad…
Un feliz y afortunado 2021 para todos…