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OAXACA, Oax. 31 de enero de 2021.- Los diputados federales Gerardo Fernández Noroña y Benjamín Robles Montoya organizaron este fin de semana una serie de actos masivos en Oaxaca, pese a la recomendación de evitar este tipo de reuniones.
Una publicidad grotesca anunció la “gira de 2 guerreros de la 4t” los días sábado 30 y domingo 31.
Benjamín Robles es quien se hizo del Partido del Trabajo en Oaxaca, en complicidad con personajes como Fernández Noroña, beneficiando a su familia, como su esposa Maribel, quien es diputada federal.
Aunque el primero dijo no creer en la Covid, y viajó a Oaxaca sin cubrebocas, ni lavarse las manos continuamente, tanto Benjamín como su esposa han anunciado que estuvieron contagiados del virus.
El sábado 30 recorrieron las comunidades de Dolores Hidalgo, Santiago Yaveo, General Felipe Ángeles, San Juan Mazatlán y Matías Romero Avendaño.
Este domingo, la convocatoria es para concentraciones en Santo Domingo Ingenio, Santiago Niltepec, Santo Domingo Zanatepec y Chahuites.
La desesperación del PT es que en este proceso electoral irán solos, y su presencia es incipiente en la entidad.
El PT es uno de los partidos rémoras que ha tenido la democracia, siempre pegado a los partidos grandes para poder obtener sus cotos de poder.
Es tal la ambición que, sin importarles la exposición de personas vulnerables a los contagios, siguen en campaña haciendo reuniones y tratando de salvar su patrimonio familiar.
Fernández Noroña estuvo en todo momento sin cubrebocas, con su barba desaliñada y ese aspecto deplorable, haciendo más notoria su halitosis, la que señalan quienes han estado cerca del personaje.
Más allá de su aspecto personal, lo cuestionable es que Fernández Noroña y Benjamín Robles están condicionando la presencia de seguidores con el argumento de que son “obradoristas” y tienen el manejo de programas sociales.
Noroña ha sido cuestionado por su misoginia y el ejercicio de violencia de género en contra de la diputada Adriana Dávila, de quien pidió elementos “para ponerle una chinga la próxima vez que abra la boca”.
En su siempre estilo vulgar, llamó a la diputada “más bocona que la chingada”, y aunque por salvar su relección ofreció una disculpa pública, el antecedente de su forma de ser quedó registrado en testimonios públicos.