Una manera de autocuidado es nombrar lo que sentimos: Iveth Luna Flores
· El diálogo directo y digno con los protagonistas del arte y la tradición es la fórmula que mantiene vigente Santa Cultura
· La pandemia no silenció a Santa Cultura, que ya este medio no depende de productos turísticos disfrazados de cultura, sino con el día a día del acontecer cultural.
OAXACA, Oax. 22 de abril de 2022.- La insistencia en dar a la información cultural un espacio digno, en una tierra donde las manifestaciones costumbristas, las manifestaciones contemporáneas y las actividades artísticas fluyen todos los días, ha sido una de las premisas que el director del medio de comunicación Santa Cultura, José Luis Pérez Cruz ha buscado con el proyecto que fundó y que este 2022 cumple diez años.
“Santa Cultura ha sido un foro confiable para la comunidad cultural de Oaxaca, y una referencia para creadores que vienen de otras partes del mundo a presentarse a esta tierra. Hacemos alianzas con festivales regionales, internacionales y nacionales en busca de atraer públicos” explica el periodista cultural.
Y añade que es el diálogo directo con los protagonistas del arte y la tradición, la fórmula que mantiene Santa Cultura, que comenzó como un programa de radio en amplitud modulada y hoy transmite por internet, en redes sociales y tiene una página web: www.santacultura.mx
“Santa Cultura es una plataforma de comunicación que se ha adaptado a sus circunstancias y obstáculos, en aras de siempre estar vigente, la constancia es su mayor virtud. Y su permanencia la sostienen sus colaboradores que tiene fe en este proyecto y confían en la manera de tratar la información”.
El comunicador señala que otro de los pilares de Santa Cultura es el compromiso de la periodista y fotógrafa Regina Mejía, quien desde el día uno hizo alianza para cimentar este esfuerzo. A la lista se suman muchos nombres de hombres y mujeres que dan su tequio en diferentes momentos por el gusto de ser parte de este medio.
En diez años Santa Cultura ha emitido cerca de un mil programas, muchos de ellos en diferentes recintos culturales de la ciudad de Oaxaca, pero también en poblaciones de los Valles Centrales, la Mixteca y el Istmo de Tehuantepec, Así como la Ciudad de México. E incluso es un vínculo con la comunidad oaxaqueña radicada en Estados Unidos de Norteamérica.
– Un medio independiente después de la pandemia
“Con la pandemia las actividades culturales oficialmente se detuvieron, pero los espacios independientes no del todo, Santa Cultura dejó de transmitir en abril y mayo de 2020, pero en junio seguimos con el programa hasta la fecha. Hay sin duda un movimiento fuerte de iniciativas ciudadanas que rebasan el letargo de las instancias oficiales”, opina José Luis Pérez Cruz.
“Mucho presumimos de Oaxaca como un punto medular en el mapa cultural del mundo, pero escasas oportunidades hay para sustentar proyectos como Santa Cultura, sin embargo al ser una plataforma de comunicación independiente, eso nos permite ejercer la libertad de expresión y de asumir el compromiso de que la verdad sea la bandera que nos da prestigio”.
El periodista cultural comenta que es urgente tratar la información cultural con profesionalismo, más allá de relatarla como un espectáculo de oropel al que se han rebajado las actividades tradicionales, poniendo en riesgo su historia y razón de ser. “Un ejemplo es la Calenda, que de ser un acto de fe de la Iglesia Católica, su apropiación comercial la denigra y convierte en borracheras callejeras para graduaciones y bodas”
José Luis Pérez Cruz originario de Oaxaca de Juárez, añade que Santa Cultura se sostiene del compromiso con la identidad que heredó de sus padres y abuelas, ya que ellos le contaron y mostraron un Oaxaca no documentado, y le legaron la personalidad y ética que ellos vivieron.
“Desde hace 28 años, escribir sobre lo que era cotidiano en un Oaxaca totalmente diferente, me hace reflexionar en lo que hoy se ha convertido la ciudad con la gentrificación, que desplaza a los habitantes de sus territorios para someter a sus culturas y adaptarlas al servicio turístico. Desde el siglo pasado el turismo ha disfrutado de Oaxaca, sin necesidad de ser timado con productos turísticos sustentados en la ignorancia, Oaxaca es mucho más que un maquillaje de calavera ensuciando una indumentaria regional”.