Hallan cadáver en un paraje de Juchitán
JUCHITÁN, Oax. 29 de septiembre de 2022.- Integrantes de la comunidad religiosa de la parroquia de San Vicente Ferrer, advirtieron con firmeza que podrían rechazar que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) participe en los trabajos de reconstrucción del templo que quedó dañado por el terremoto del 7 de Septiembre de 2017 si este fin de semana no dan fecha para el reinicio de la obra.
A cinco años de ocurrido el movimiento telúrico que dejó severos daños estructurales en edificios históricos de la ciudad y en miles de viviendas y negocios, los feligreses ven con preocupación el paso del tiempo sin que los trabajos se reanuden por argumentos técnicos y financieros.
El pasado 7 de Septiembre en una reunión con el presidente municipal Emilio Montero Pérez y miembros de Sedatu, Segob, Sevi y otros organismos e instituciones federales involucradas en el proceso de reconstrucción, la postura de los feligreses fue tajante:
“Si no pueden, nosotros lo hacemos, pero el INAH ya no va a entrar”. Entonces el presidente había señalado que en el proceso de reconstrucción las distintas autoridades estaban atendiendo “venas, vértebras, pies, pero el corazón está todavía lastimado y el espíritu, que es por supuesto la iglesia de San Vicente Ferrer”.
Y es que ese día 7 de Septiembre en que las autoridades federales acudieron para acompañar al edil a la ceremonia para conmemorar el quinto aniversario del terremoto de magnitud 8.2, les tocó escuchar y ver la protesta de vendedoras de alimentos quienes exigían también la conclusión de su área de venta ubicada en la parte baja del lado sur del palacio.
En las instalaciones donde funciona el cabildo municipal de manera provisional, los integrantes de la iglesia del patrón del pueblo San Vicente Ferrer, aceptaron participar para este fin de semana en una reunión de trabajo para que les informen de los avances y plazos para el inicio de la reconstrucción y restauración del templo católico y de no ser satisfactorios podrían hacer realidad su amenaza, pese a que el INAH advierte que los trabajos de restauración debe realizarlos personal experto.
Hasta ahora se sabe que el avance de reconstrucción del templo de San Vicente Ferrer es de apenas 30% construido con el pago de un seguro contratado por el INAH para este tipo de edificios y con trabajos previos de diagnóstico realizados por la Constructor sabe contratados por la fundación Harp Helú. El monto de seguro fue insuficiente y el Instituto del Patrimonio Cultural del Estado de Oaxaca (INPAC) que se haría cargo de los trabajos prácticamente ya no opera porque están en proceso de cierre por el cambio de gobierno.