
Con Trump: no es campañita; entre la CIA y Boinas Verdes
“Eros
Los efímeros mortales no imaginan el trabajo tan delicado y
desconcertante que supone favorecer sus amores.”
Irene Vallejo
Época de fiestas, propósitos, gastos excesivos, estrenos, etcétera, todo desde la orientación del mercado que guía la conducta humana en este mes, y para prolongar la “convivencia” ofertas. ¡Ah! El otro mercado también está abierto con la ley de la oferta y la demanda, gangas y dispendio.
Lo que menos se escucha y atiende en esta etílica época que favorece al humano estado anímico, es la razón. Nadie verá los asesinatos este fin de semana en Guanajuato en la posada de Salvatierra, al final fueron sólo doce jóvenes en una fiesta, y semanas pasadas cinco estudiantes de medicina que “fueron a comprar drogas al cartel equivocado”.
En medio de lo coloquial y manipulado fin de año más, el festejo es por el buen año nuevo, sin percatarnos qué “cada día no es uno mas, sino uno menos” para citar parafraseado a Carlos Marx. ¡Sí, ya sé! lo escrito suena a la imagen del personaje verde creado por, otra vez adivinó, por la mercadotecnia.
Hay en esta época hay aquellos que ya se sienten con el logro de la justicia revolucionaria en sus manos. Quienes hasta cambiaron su legitima aspiración por la que invirtieron sus economías logradas con el triunfo de la revolución y decidieron, al darse cuenta que no les va a tocar negocios y tesorería, voltear hacia otros espacios dignos de sus honestas personas, al cabo qué, el objetivo es continuar su vida revolucionaria, abordo de los autos último modelo que el mesías dice no utilizan los que además, no mienten y que no traicionan.
De analizarse la ignorante idea de anunciar la reforma para imponer impuestos a las propiedades comunales y ejidales. La impudencia, la falta de decoro, la ausencia de recato, son insultantes y evidencia la personalidad de quienes con micrófonos, gobiernan el estado con ocurrencias.