Economía en sentido contrario: Banamex
El aviso sonó fuerte. 1998 año de proceso electoral en Oaxaca. “El profe”, quien además es relojero y joyero enérgico dijo “salte aquí, vamos a ahorrar las casetas de aquí a México”.
Nos encontrábamos en Tehuacán, Puebla, justo a unos metros de la caseta de cobro en la llamada súper
carrera Oaxaca-Cuacnopalan.
Tomamos entonces la salida hacía la carretera libre con destino al entonces Distrito Federal.
La causa, asistir a la celebración del Consejo Nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD) que discutiría la convocatoria para elegir candidatos a gobernador y ponía inicio a la competencia para candidatos a diputados locales.
Después de los resultados en las urnas del pasado 2 de junio, el PRD ha perdido su registro. Atrás quedó la necesaria historia de esa izquierda democrática que brindó luchas, resistencia y encabezó causas en el México de la post guerra sucia.
El tránsito democrático nacional no se explica y menos se justifica sin la aportación histórica del PRD.
En el México contemporáneo, esa vivencia del ahorro que el profe exigió no se entiende. Hoy las candidaturas se adquieren por menciones.
¿Cuál izquierda que ganaba debates y perdía votaciones? Aún así, la ignorancia histórica celebra, con todos los errores que se hayan cometido en el PRD, la perdida del registro de ese partido. México, las instituciones en pos de una democracia perfectible, los mismos que hoy festinan que no hayan alcanzado el porcentaje de ley para sostenerse como partido político nacional, pecan de ignorancia y de su origen.
Preguntas a los militantes de los partidos triunfadores honestos, que no traicionan y que no roban, ¿nombres del grupo que regenteó en Oaxaca las siglas del PRD del 2000 al 2024? ¿Grupos dominantes en el PRD local? ¿nombre de los dirigentes de esos grupos?
Cite el nombre de quienes hoy encabezan el gobierno del estado. La coincidencia que encuentre, será solamente error histórico.