
Los cuatro frentes de Claudia y lucha de AMLO por la hegemonía
Desde que tengo uso de razón que es un decir, registro las acciones que los diferentes gobernantes imponen con toda la fuerza y el poder que les da la impunidad, la omisión y la escasa participación de la población ciudadana para operar lo que consideran adecuado a quienes gobiernan aunque en no poca ocasiones son meras ocurrencias si no es que trágicas decisiones, ridículas pretensiones y una cauda de aspiraciones que van desde sus metas y deseos incumplidos en una mezcla de resentimiento, venganza y placer mórbido sobre no quiénes se la hicieron sino quiénes se la pagan. Arriba y adelante que parecía más bien albur cachondo, administremos la pobreza que defenderé el peso como un perro, la renovación moral, democracia y solidaridad la solución somos todos, bienestar para las familias, comes y te vas, víboras prietas por tepocatas, para que vivamos mejor, mi compromiso es contigo y por el bien de todos primero los pobres, son los lemas y pivotes discursivos que a lo largo de 54 años escuché una y otra vez, por los medios inimaginables y hasta el hartazgo de sus panegiristas, empleados, favoritos, chayotastlas y uno que otro exquisito académico e intelectual hijos favoritos del régimen en turno.
Unos más otros mucho más pero todos sin distingo de partidos, principios o estatutos ejercieron en su momento sus acciones de gobierno con propaganda desgastada a fuerza de repetición con frases, slogans y clises como “ algo inédito, por primera vez, como nunca antes, sin parangón, en un hecho histórico” y tantos más hasta llegar al hoy inefable “no somo iguales” en que de manera directa y ocupando la tribuna privilegiada del gobierno diariamente disparan una cantidad tal de mentiras documentadas, verdades a medias, estadísticas truqueadas y sobre todo el ataque permanente a todo lo que se opone, critica o se piensa diferente convirtiendo el clima en una hoguera pública y difundiendo datos no solo fuera de ley exponiendo direcciones y números telefónicos particulares, presuntas propiedades e ingresos sin mayores pruebas en la más completa impunidad.
Una serie de modificaciones constitucionales han caracterizado a las ultimas administraciones convirtiendo a la Constitución General en una especiede miscelánea que lo mismo consigna articuladospioneros a nivel internacional estos si históricos como los derechos individuales hoy transformados en derechos humanos, que prohibiciones nimias y bastante impugnables en algo que pareciera la interpretación de los entenados del 68 que así piensan que adquieren peso y de paso machacar como “históricos” en un sistema de explotación e individualismo que por años nos solo los excluyó, sino los reprimió, los omitió, los discriminó y fueron víctima de bullying de clase y que hoy se las están cobrando a la nación entera. De las últimas leyes impulsadas está la inminente elección de los integrantes del poder judicial federal y la mayoría de las entidades federativas por medio del voto que promueven una y otra vez como el acceso del “pueblo” y que implicará a jueces, magistrados y ministros que son más de 880 puestos agrupados en seis boletas de distintos colores con dos columnas para hombres y mujeres y un número que será al que los que voten habrán de anotar en una casilla en la parte superior de esas boletas y que tomando en cuenta los diferentes candidatos ya seleccionados por dos poderes de la unión porque el judicial no hizo su propuesta por considerar que no era legal y el senado comandado por el inefable Ñeroña lo hizo, por cada uno de lospuestos en juego, el elector que acuda tendrá que decidir entre al menos 2000 aspirantes.
A unos pocos días de la elección del primero de junio de 2025 en que se publica esta colaboración, al menos hasta ahora no hay información mínima de la ubicación de las casillas que no necesariamente serán en los sitios tradicionales de otras elecciones, la información pública sobre los candidatos a elegir están en el sitio del órgano electoral federal que para acceder a él se necesita contar con el servicio de la internet que en entidades como Oaxaca es apenas del 50% de los hogares así como la dispersión geográfica y el casi nulo acceso a los medios de comunicación tradicionales donde se está promoviendo esta elección. El recorte de los recursos para la jornada electoral, la escasa participación de la ciudadanía en los encargos electorales, el desconocimiento de la mayoría de los candidatos por el electorado, así como la previsión más realista que el porcentaje de votantes no rebasará el 6% que de acuerdo con el padrón electoral de Oaxaca sería alrededor de 200,000 no parece pintar un escenario halagüeño: Tal vez el partido en el poder confíe en que el voto que como se asegura en diversos medios de comunicación está induciendo como otros tanto gobiernos, aún con una votación pírrica, les asegure el triunfo de sus candidatos.
Gerardo Garfias Ruiz