Accidentes en el hogar, EDAS e IRAS, complicaciones más frecuentes: SSO

Oaxaca, Oax, 23 de mayo del 2011 (Quadratín).- Ante las complicaciones más frecuentes en niños de cero a 18 años de edad, los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) capacitan al personal médico de centros de salud y hospitales sobre Atención integrada al recién nacido, infancia y adolescencia.
En entrevista con la jefa del departamento de atención a la infancia y adolescencia, Margarita Martínez Morales, informó que los principales padecimientos en recién nacidos son la Sepsis bacteriana y asfixia.
Respecto a los niños de uno a cuatro años, dijo que las enfermedades más frecuentes son las Diarreicas Agudas Severas (EDAS), Infecciones Respiratorias Agudas Severas (IRAS) y desnutrición, en tanto que de cinco a nueve presentan mayores problemas por accidentes en el hogar.
Asimismo, agregó que durante el taller se capacitará al personal para sensibilizar a las adolescentes a fin de prevenir el embarazo en esta etapa de la vida, ya que representa gran riesgo al no alcanzar el desarrollo óptimo del útero para poder dar vida.
Dijo que por instrucciones del ejecutivo estatal, Gabino Cué Monteagudo, y el secretario de Salud, Germán Tenorio Vasconcelos, la profesionalización del personal médico, paramédico, enfermería y psicología, será un pilar fundamental con el objetivo de brindar la atención que los oaxaqueños reclaman.
Por ello aseguró que en lo que va del año, ésta es la tercera edición con una asistencia de 91 trabajadores que replicarán los talleres en cada una de las seis jurisdicciones, hasta ampliar la capacitación a toda la plantilla laboral de la institución.
Aseguró que con el objetivo de disminuir la morbi-mortalidad de niñas y niños oaxaqueños se tratarán Indicadores epidemiológicos y metas del milenio, componentes de atención integrada, esquema de vacunación, dificultad respiratoria en el recién nacido, habilidades sociales para la vida, entre otros.
Finalmente la especialista dijo que la salud de los infantes debe ser una responsabilidad compartida entre padres de familia y médicos, “debemos crear una cultura de prevención a través de buenos hábitos de vida en los pequeñitos”.