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MÉXICO, DF., 15 de noviembre de 2015.- Los mandatarios participantes en la Cumbre de Líderes del Grupo de los 20 (G20) reafirmaron que el terrorismo no puede ni debe ser asociado con religión, nacionalidad, civilización o grupo étnico alguno.
Al participar en la sesión sobre los dos retos globales de nuestro tiempo: el terrorismo y la crisis de los refugiados, el presidente Enrique Peña Nieto condenó enérgicamente los atroces atentados terroristas registrados el pasado viernes en la ciudad de París, Francia, así como los ocurridos recientemente en Líbano y Turquía.
El Presidente Peña Nieto fue el último Mandatario en tomar la palabra; suscribió lo dicho por los demás mandatarios, como la importancia de combatir el tráfico de armas y de personas, y el financiamiento internacional al terrorismo, informó la Presidencia de la República.
Reiteró que ninguna razón justifica que se ataque a civiles indefensos, al tiempo que expresó la profunda solidaridad del pueblo y del Gobierno de México con las víctimas y sus familiares.
El Presidente recordó que los trágicos sucesos ocurridos en París también cobraron la vida de dos mexicanas y puntualizó que ninguna razón justifica que se ataque a civiles indefensos.
Los mandatarios participantes en el G20 reafirmaron que el terrorismo no puede ni debe ser asociado con religión, nacionalidad, civilización o grupo étnico alguno.
Indicaron también que el combate contra el terrorismo es una prioridad fundamental para la comunidad internacional y reiteraron su disposición de trabajar de manera conjunta para combatir los actos terroristas.
Peña Nieto señaló que no hay extremismo bueno para la humanidad; y propuso con claridad, que los comentarios vertidos por los líderes del G20 durante la reunión debían traducirse en una acción global real en contra del terrorismo, de la mano de la Organización de las Naciones Unidas.
Fuente: Quadratín México