Diferencias entre un estúpido y un idiota
MÉXICO, DF, 10 de noviembre de 2014.- A través del CCE y todos los organismos de representación cupular de nuestro sector, los empresarios de México hemos hecho un llamado conjunto a todos los ámbitos de la sociedad para que los mexicanos hagamos un compromiso ejemplar para fortalecer a nuestras instituciones.
Tenemos que sumar fuerzas para impedir que la corrupción se siga imponiendo, y la impunidad acumule más abusos y víctimas. Urge que actuemos a fondo en éste, que es el gran pendiente nacional.
Hemos logrado avances fundamentales para el desarrollo económico, hay que dar los pasos complementarios necesarios para apuntalar la vigencia del Estado de derecho, la gobernabilidad democrática, la justicia y la seguridad pública.
En ese sentido, vemos como una gran noticia y signo de esperanza en México, al conjunto de manifestaciones a favor de concretar un nuevo Pacto o gran acuerdo para el Fortalecimiento de las Instituciones del Estado Mexicano, tanto desde las fuerzas políticas, como en la sociedad civil.
Así nos hemos expresado para ir hacia delante con este compromiso nacional para regenerar la vida pública en México, con organizaciones como el Observatorio Nacional Ciudadano para la Seguridad, la Justicia y la Legalidad; Transparencia Mexicana, México S.O.S., IMCO, México Evalúa, Sociedad en Movimiento, Mexicanos Primero, Fundación Este País, ANADE, Consejo de la Comunicación, México ¿cómo vamos?, Centro de Estudios Espinosa Yglesias, CMIC, CAINTRA de Nuevo León, CCIJ, AMAFORE, CIDAC, Consejo Ejecutivo de Empresas Globales, y CONMEXICO entre muchas más.
A este trabajo conjunto seguramente vamos a seguir sumando organizaciones, visiones compartidas y esfuerzos de la sociedad.
Es muy importante, esta iniciativa cuenta con el aval y liderazgo del Presidente de la República.
Los ciudadanos tienen que ser parte de este nuevo acuerdo, que retome las problemáticas de coyuntura para emprender cambios de fondo, atacando las causas de la impunidad y la inseguridad.
Por ello, hacemos un llamado a los distintos sectores: de manera paralela a los acuerdos que se están dando en el seno de la clase política, generemos un Pacto de la Sociedad, para la Sociedad y por la Sociedad, que dé seguimiento a los compromisos de Estado, para asegurar que se cumplan.
Construyamos una instancia ciudadana que colabore con los responsables de la operatividad del Acuerdo Político.
De igual forma, tenemos que sentarnos, como sociedad, para establecer objetivos compromisos y metas de cada sector: organizaciones ciudadanas, sector privado, organizaciones religiosas, medios de comunicación y la academia. Todos juntos por el cambio a fondo en México.
El concepto de compromiso es fundamental, para que el esfuerzo tenga proyección y no quede sólo como acto de buena voluntad. En este acuerdo o pacto nacional, tenemos que comprometernos efectivamente, con corresponsabilidad, en acciones concretas y que persigan resultados igualmente tangibles.
En este sentido, un eje fundamental es la creación de un verdadero Sistema Nacional Anticorrupción, sólido y eficaz. En esta tarea, consideramos que hay bases suficientes para concretar un producto final adecuado, a partir de la iniciativa que acaba de presentarse con este efecto en el Congreso, más otros proyectos de ley que ya se han trabajado en esta área y en materia de procuración de justicia.
Así mismo hemos presentado diversas propuestas desde el sector privado y la sociedad civil.
Tener lista, antes de que termine el año, la plataforma institucional para este Sistema Nacional Anticorrupción, tiene que ser un compromiso. Es tal vez la mayor prioridad para los últimos dos meses del 2014.
En la propuesta de este sistema, es importante el énfasis en eliminar la fragmentación de las instancias encargadas para prevenir, detectar y castigar la corrupción. Es fundamental tener controles para cerrar espacios a los actos delictivos, pero en igual medida es indispensable que haya sanción.
Parece adecuado el énfasis en tener una política bien armada de rendición de cuentas, con un esquema horizontal de pesos y contrapesos, en el cual todos los órganos públicos, en sus tres niveles y tres poderes de gobierno, así como los servidores públicos que los integran, sean corresponsables.
Entre los temas que, en una primera revisión, vemos que deben considerarse, es asegurarnos que las instituciones responsables de combatir la corrupción tengan autonomía efectiva.
Asimismo, no se contemplan reformas relativas al servicio público de carrera ni a políticas de desarrollo institucional y recursos humanos.
Por último, pensamos que debe generarse un Tribunal Anticorrupción independiente.
Un aspecto fundamental es que los acuerdos tengan bien delimitados tiempos, responsables, objetivos y consecuencias de incumplimiento. Sobre todo, reiteramos, se necesitan acciones concretas y respuestas contundentes a problemas inmediatos.
Con la participación de todos, el resultado será un gran Acuerdo de la sociedad y por la sociedad a favor de México.