Bloquean vecinos de la Gómez Sandoval por obra inconclusa
OAXACA, Oax. 16 de mayo de 2015.- La Coordinación Estatal de Protección Civil confirmó que este año el fenómeno de El Niño afectará al país, lo que implica una disminución en las lluvias en la región norte y occidente, mientras que en el centro, noreste y litoral del Golfo de México las precipitaciones aumentarán.
De acuerdo con datos de la Reunión Nacional de Protección Civil para la temporada de lluvias y ciclones 2015, están pronosticados 19 ciclones para el Pacífico, debido al fenómeno de Niño débil, sin embargo para los próximos meses hay un 65% de probabilidad de que dicho fenómeno sea moderado a fuerte.
El Niño es un fenómeno global oceánico atmosférico de variabilidad natural. Se caracteriza principalmente por un ligero calentamiento o enfriamiento de la temperatura en la superficie del océano Pacífico en las regiones ecuatoriales, lo cual incide en los niveles de lluvia.
El impacto del fenómeno dependerá de su intensidad y duración. Uno de los escenarios es que El Niño provoque menos lluvias en el noroeste, occidente del país y la Península de Baja California, con más lluvias en el centro y noreste del Territorio Nacional y el norte del Litoral del Golfo de México.
El incremento de la temperatura en el Pacífico lo detectaron desde otoño pasado el Centro de Predicción del Clima y la Agencia Estadounidense para la Atmósfera y el Océano, instancias que pronostican que podría prolongarse hasta 18 meses.
La última vez que declararon El Niño fue en 2009, año en donde comenzó la segunda peor sequía de los últimos 60 años. Otro año que sufrió falta de agua por este fenómeno fue 1997, la cual afectó a gran parte del país, según los registros del Monitor de Sequía en México.
Datos de la Secretaría de Agricultura (Sagarpa) indican que en 2009 la sequía costó 42 mil cabezas de ganado, aunque organizaciones campesinas estimaron pérdidas mayores.
Sobre los posibles impactos de El Niño en el campo mexicano, la Sagarpa informó que de acuerdo a sus competencias su responsabilidad es la de proteger la producción agroalimentaria, por lo que ya se tienen protegidas 10.04 millones de hectáreas de cultivos y 11 millones de cabezas de ganado por medio del seguro catastrófico a productores.