OAXACA, Oax. 12 de abril de 2016.-
- El “histórico” albazo legislativo para aprobar casi en penumbras la Ley de Educación Pública Estatal tiene mucha semejanza con el operativo montado en el 2015 para que el jefe del poder ejecutivo estatal emitiera el decretazo para “desaparecer” al “viejo” IEEPO: se hizo con mucho sigilo, precisión y coordinación institucional. En el decretazo los principales actores fueron el gobernador Gabino Cué; el entonces Jefe de la Oficina de la Presidencia, Aurelio Nuño; por supuesto el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong y los altos mandos de la PFP y el Ejército. Ahora, en el plan para tomar por sorpresa al magisterio oaxaqueño la coordinación institucional corrió a cargo de la oficina del titular de la SEP, Aurelio Nuño; por la parte gubernamental a nivel estatal el vicegobernador Castillo y la oficina de Comunicación Social; y la Junta de Coordinación Política de la 62 Legislatura.
- Solo fueron convocados 28 diputados: toda la bancada del PRI y PAN; Jaime Bolaños Cacho, diputado del PRD que también es vocero del candidato a gobernador del CREO, José Antonio Estefan Garfias; y legisladores de los partidos minoritarios, con excepción del diputado del PSD , Manuel Pérez Morales. Todos votaron casi a ciegas a favor de la iniciativa de ley, copia casi fiel de la Ley General de Educación y promovida meses antes por la bancada del PRI, proyecto que por cierto observaba un mayor número de inconsistencias que la iniciativa surgida de foros públicos convocados por la 62 Legislatura y la sección 22 del SNTE y que el mismo gobernador Gabino Cué primero lo defendió y después lo desconoció. Al final de cuentas lo importante no era conocer, revisar y analizar la iniciativa, ahora convertida en Ley, sino aprobarla antes del 15 de mayo, aún violando disposiciones legales y normativas.
- A reserva de conocer el contenido de la nueva ley educativa, lo que no debe perderse de vista es que en tanto se trata de un ley rechazada no solamente por el magisterio, sino por los propios diputados y diputadas que fueron ignorados para participar de la oscura sesión -fundamentalmente de la fracción parlamentaria del PRD-, su aplicación va a observar fuertes resistencias, en condiciones muy similares a las que se han presentado con la reorganización del IEEPO.
- Una ley que no es resultado de un procedimiento apegado a derecho, que ignoró olímpicamente otras iniciativas y que se impuso a base de cañonazos y consignas político-partidistas no va a llegar a buen puerto y resultaría ingenuo pensar que la misión está cumplida o que ya el caso está cerrado. Al contrario, al margen de las impugnaciones de carácter legal, lo que ya está a la vista es el inicio de un nuevo capítulo de conflictos, tensiones y movilizaciones de la sección 22 del SNTE en contra de los gobiernos federal y estatal y de los legisladores del PAN, PRI, MC, PVEM, PUP y PANAL.
- Analizado en el contexto del proceso electoral local, es claro que el peor escenario al que nos podríamos enfrentar con la “armonización educativa” no consensada es que los sectores mas radicales del magisterio se decidan por el boicot electoral como lo hicieron en el 2015, escenario nada deseable pues con ello se corre el riesgo que de nueva cuenta sea la federación la que tome por asalto la entidad, vía presencia masiva de la PFP. Pero esta misma radicalización puede agudizar la política laboral de mano dura asumida por la SEP y el gobierno del estado, vía IEEPO, en contra de todo el magisterio. Lo que no cabe duda es que las hostilidades entre magisterio y gobierno se han reavivado y los que pagarán los platos rotos serán los ciudadanos y la niñez oaxaqueña.
Twitter: @YescasIsidoro