El episcopado ante el segundo piso de la 4T
Imposible olvidarlos, pero la vida sigue y no hay que llorar la muerte, sino celebrar la vida
MÉXICO, DF, 13 de noviembre de 2014.- De qué sombrero de mago sacan argumentos convincentes, los miembros del directorio ejecutivo del Fondo Monetario Internacional, para elogiar la conducción de la política económica de México, cuando los indicadores del comportamiento de la economía son groseramente mediocres y sólo reflejan las contradicciones de un sistema neoliberal salvaje y agresivo, y cuando es evidente el estado de malestar de millones de trabajadores.
Este miércoles 12 de noviembre, la Secretaría de Hacienda pretendió presumir de sus “logros”, dando a conocer una evaluación que sobre la política económica presentan los ejecutivos del FMI, quienes no se miden en hablar de recuperación económica, aunque no pueden ocultar los porcentajes crueles que mantienen de rodillas a la economía real, la de los trabajadores. Los dueños, por supuesto, jamás tendrán problemas crezca o no crezca el producto interno, o se estanque o se recupere.
De dónde sacan los economicistas fridmanianos del FMI que un crecimiento de 2.4 por ciento, que es el que estiman para este año, indica recuperación, cuando originalmente los pronósticos oficiales lo estimaban muy cercano al 4 por ciento, un porcentaje que tampoco es remunerador.
Celebran los empleados de Washington, porque eso son los señores del directorio de ese ente supranacional, que la actividad de la construcción en México “se está fortaleciendo”, sustentada por la recuperación en la inversión residencial y el incremento en el gasto público en infraestructura.
Sin embargo, no pueden ocultar que el crecimiento del crédito de la banca comercial a las empresas y los hogares se desaceleró en la primera mitad del 2014 y que tal desaceleración estuvo concentrada en el sector de la construcción.
O que, como ellos lo reconocen, los bancos redujeron fuertemente los préstamos al sector (construcción) después de que, el año pasado, surgieron problemas financieros en las tres empresas constructoras más grandes del espectro industrial.
Tampoco pueden dejar de reconocer que el crecimiento del crédito al consumo de los hogares se moderó, al caer de una tasa de 16 por ciento el año pasado a una de 8 por ciento este año.
Y lo más importante: el mercado laboral. El objetivo de la economía capitalista es hacer crecer al máximo el capital de las empresas, pero mediante el logro del pleno empleo, que es lo único que crea una demanda de bienes y servicios eficiente para generar riqueza. Una economía es pobre cuando la demanda de bienes y servicios se mantiene en la depresión. Y más miserable aún cuando mantiene a los trabajadores en la miseria.
No pueden dejar de reconocerlo los “expertos” de la institución financiera supranacional: “los indicadores del mercado laboral sugieren que la economía sigue operando por debajo de su potencial (lo que ha limitado las presiones inflacionarias.) La tasa de desempleo ha aumentado ligeramente desde principios de 2013 y el crecimiento de los salarios reales ha sido moderado.”
Los directores del Fondo se quedan en el camino. No les importan los resultados reales por destacar el deber ser. Y en este sentido elogian la culminación del proceso legislativo que impulsó una amplia agenda de reformas estructurales. Subrayan la importancia de una fuerte y sostenida implementación de esta agenda que, dicen, aumentará la productividad y el crecimiento del producto en el mediano plazo. Igualito que los voceros de la secretaría de hacienda.
Pero seguramente, cuando los señores del Fondo Monetario Internacional elaboraron su evaluación no había ocurrido “El Rapto de Ayotzinapa”. Porque el secuestro y la terrorífica desaparición de los 43 estudiantes normalistas, casi unos niños, a manos de quién sabe quién –no nos tragamos eso de los Guerreros Unidos, ni de un presidente municipal y su mujer, narcos– y el recuento de las miles de desapariciones forzadas en México dieron al traste con todo, comenzando con las tan cacareadas reformas estructurales.
www.analisisafondo.com
@AFDiario @analisisafondo