Trabaja Salomón Jara con el pueblo para reparar deuda histórica de Oaxaca
Oaxaca, Oax. 6 de abril de 2010 (Quadratín).- El diputado federal Emilio Mendoza Kaplan consideró este martes que las acusaciones que suponen, sin fundamento, un presunto desvío de recursos para actividades proselitistas, es un acto de desesperación ante la pérdida anticipada de la elección por parte de los partidos opositores al PRI.
El también secretario de organización del Partido Revolucionario Institucional (PRI), dijo a Quadratín que ante la falta de argumentos, Gabino Cué y sus seguidores, basan su campaña en descalificaciones al gobierno estatal y a la autoridad electoral.
Quien acusa debe probar y lo que están haciendo es generar un ambiente de desconfianza, preparando el camino para el asunto poselectoral, como saben que no están bien, van a querer ganar en la mesa lo que no podrán en las urnas, añadió.
Mendoza Kaplan explicó que es facultad del Congreso del Estado la aprobación de la Cuenta Pública, y la que refieren de 2009 ya fue aprobada por legisladores de todos los partidos.
Refirió que ya son dos días los que van de descalificaciones al gobierno y a la autoridad electoral, lo cual contribuye a la poca credibilidad en un proceso electoral, como falta de respeto al veredicto de la sociedad.
Las encuestas no les dan y están preparando el escenario poselectoral, hoy es la cuenta pública, mañana serán las despensas para adultos mayores y luego buscarán otro tema, mientras que el gobierno federal está volcado en Oaxaca, las caravanas de Sedesol son impresionantes y las actividades del gobierno federal como nunca, todo eso es electoral.
Respecto de las declaraciones hechas por Gabino Cué Monteagudo, consideró que es una imperfección de la ley, pues aún cuando no dice que quiere ser gobernador, está descalificando el proceso a través de golpear al partido opositor.
Como ciudadano hizo un llamado a conducir el proceso de manera ordenada, sin guerra sucia, ni señalamientos de las cuales no tiene el menor elemento.
Yo pediría que deje ese tipo de cuestiones, que tratemos de conducir este proceso con civilidad para que la sociedad tenga confianza en quienes salgan electos. Una elección, dijo, se gana con capacidad, fuera del golpeteo, de la diatriba, de la acusación infundada y con respeto al veredicto de la sociedad.