
Déjate las drogas… ¡aguas con las gusgueras!
**¡Si Dios tan sólo me hiciera una simple señal, como hacer un depósito a mi nombre en un banco!**
¡Qué calor!, oe oooo
inicia alguna rola fiestera que habré escuchado en algún concierto parecido al de Aranjuez, que sin duda aplica en estos tiempos calurosos y primaverales donde gracias a las preciosas marchas y bloqueos del día a día en nuestra chapulinesca ciudad, hacen que uno pida a gritos, casi consignales ¡una chelita por favor!
Pero en lo que uno se toma alguna beberecua espiritual, nos podemos entretener en los jueguitos que publican los panaderos en los periódicos, donde hay frases tan celebres como el chivo en cristalería, aunque hizo falta el y yo por qué, digo para eso de dar a conocer a los polacos más inteligentes de nuestra Mexicalpam de las Garnachas, que todavía sigue sufriendo su Semana Santa con la derrota ante los catrachos.
Lo que sí se viene bueno en esta ciudad de marchas, chapulines y grillos politiqueros, es la depuración del padrón electoral, digo para que los muertitos no voten, pero sin duda alguna y como siempre dando un fuerte impulso al ingenio de los nuestros, seguramente aplicarán nuevas tecnologías para lograr que las urnas sigan embarazadas por obra y gracia.
Así como por obra y gracia, escuchamos los narcocorridos que se ven el famoso yu tú, pos con eso de que tenemos nuestro Jelipillo Eliott Ness Calderas, pues la contraparte del bisne se ha puesto trucha y hasta con el éxito del Mi niño lo quiero a mi lado donde advierten una guerra más gacha como la de los londinenses con los polis o la de los gringos contra Osama Quién Sabe.
Pero esto ni le quita el sueño a la luna de miel que vienen pasando entre manita sudada y besito de cachete, ombligo con ombligo, de los gobiernos del yankee Barack Yes I Can Obama y nuestro Jelipillo, pues ya vino Hillary y ahora Janet, sólo esperamos a su patroncito.
Los que sí se revelaron son los pueblos contra el horario de verano, y es que 418 de los 570 con que cuenta este lugar chapulinesco, pues dicen que para ellos no sirve de nada, nada de nada, como todo buen político de carrera, no hacen nada y ellos (los del pueblo) ya están acostumbrados a otro bisne, con sombrero y tierra.
Pero, bueno, ya esperemos mañana darnos una caminadita en el rico sol, disfrutar de un agua fresca y jugar con los jueguitos de los panaderos, para poder gritar a los cuatro vientos, que calooor
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