Arribó buque naval a Salina Cruz con cargamento de cocaína

Huatulco, Oax. 16 de febrero de 2009 (Quadratín).- La Patrulla oceánica Matías Romero de la Armada de México arribó hace unos minutos al puerto de Salina Cruz con un cargamento de de unas 7 toneladas de cocaína y cinco detenidos.
En medio de un fuero dispositivo de seguridad en el que participan un avión, dos helicópteros y centenares de infantes de Marina con el rostro cubierto con pasamontañas, el buque se encuentra ya en las instalaciones de la XII Zona Naval Militar
Informes proporcionados por mandos militares señalaron que dentro de unos minutos se hará la presentación ante una treintena de reporteros de medios de comunicación de los cinco tripulantes del barco pesquero “Polar 1”, a bordo del cual fue asegurado este cargamento
El acto se llevará a cabo en la plataforma de la Patrulla oceánica Matías Romero y estará encabezado por el vicealmirante José María Ortegón Cisneros, comandante de la XII Zona Naval Militar, son sede en este puerto
Con base en información difundida hasta este lunes, el barco pesquero Polar 1 fue detectado desde aguas panameñas, haciendo movimientos sospechosos por el Servicio de Guardacostas de Estados Unidos a unas 760 millas náuticas (mil 400 kilómetros) de la costa, en el océano Pacífico.
La primera información sobre este decomiso de droga se dio a conocer este domingo en el puerto de Acapulco durante la ceremonia de despedida del buque escuela Cuauhtémoc, cuando el secretario de Marina Armada de México, Mariano Francisco Saynez Mendoza, confirmó la captura de cinco presuntos narcotraficantes.
De acuerdo con convenios internacionales, la patrulla estadunidense solicitó permiso al gobierno mexicano para realizar la revisión del buque sospechoso –por ser de bandera nacional–, y luego de detectar la droga dio parte a la Armada, la cual envió una patrulla oceánica.
Al arribar al lugar, la patrulla oceánica Matías Romero tomó conocimiento de los hechos y le fue entregada la cocaína, así como los cinco tripulantes.
Como el pesquero estaba averiado, el alto mando de la Armada resolvió hundirlo ahí mismo para evitar problemas a la navegación.