Aseguran propietarios de Tulum que ejidatarios invadieron tierras

Patricio Miguel O´Farrill, representante legal de algunos dueños; Esteban Shciavon, propietario, y Roberto Palazuelos, empresario hotelero, aseguran que la publicación de la periodista esta distorsionada, manipulada y que no es apegada a la realidad, pues afirman que hay muchos ejidatarios de la Riviera Maya que invadieron los predios.

El empresario hotelero Roberto Palazuelos dijo que en el Registro Público de la Propiedad existían bienes debidamente registrados y afirma que fueron los ejidatarios quienes invadieron los predios.

Hizo referencia a la persona que sale en el video gritando ¡viva México!: “A ese hombre que yo lo conozco, es un argentino que yo traje a Tulum. Sí, el desalojo fue muy brusco, pero provenía de un juicio, y quien hizo ese reportaje está mal informado”.

Por su parte, O´Farrill señaló a los ejidatarios de invadir tierras privadas, pues “les hicieron creer que sus tierras llegaban hasta el litoral, y ahora el gobierno tiene que enfrentar esta situación que heredada tiempo atrás”.

Respecto del reportaje, dijo que “un periodista debe investigar como si fuera un juez, un fiscal y no irse con la primera versión que les dan porque esto causa graves daños”.

Esteban Shciavon, propietario de terrenos en Tulum, asegura que su padre compró los terrenos desde 1975, pero “ahora hay otros ejidatarios que se metieron a nuestras propiedades, invadieron nuestros ejidos, se lo vendieron a otras personas, estamos llenos de extranjeros en esa zona”.

En su reportaje, Lidia Cacho da cuenta de una serie de despojos a ejidatarios de la Riviera Maya. “Desapariciones forzadas, homicidio, persecuciones, amenazas, extorsión… así se consigue despojar de tierras a ejidatarios de la Riviera Maya. Las dinámicas de despojo responden a una guerra abierta entre empresarios corruptores y políticos corruptos, que han tomado a los tribunales agrarios como rehén, corrompiendo jueces en ocasiones”, dice.

Cacho entrevistó a ejidatarios, quienes dieron testimonio de los despojos que sufrieron de sus tierras, así como de la muerte de su abogado Álvaro López Joers, quien defendía la causa de 40 personas, propietarias legítimas de diversos terrenos en el ejido de Tulum, denominado oficialmente Ejido José María Pino Suárez.