Asesores tuxtepecanos comprometidos con la educación de los adultos

Oaxaca, Oax., 15 de julio de 2009 (Quadratín).- Llevar educación a los miles de analfabetas existentes en el estado, no sería posible sin la ayuda de los asesores, que día a día, acuden a los Círculos de Estudio y Plazas Comunitarias, para enseñar a los adultos a leer y escribir; prueba de ello, son los cinco asesores que se sumaron a los esfuerzos del Instituto Estatal de Educación para Adultos, (IEEA), para que su comunidad San Juan Bautista Tuxtepec, abandone las filas del analfabetismo.
Como es el caso de Juana Inés González, quien ha sido asesora por más de cinco años y que durante este tiempo, ha comprendido que alfabetizar a sus paisanos es importante, para que tengan herramientas con que defenderse, ya que no quiere ver que abusen de ellos por no saber leer ni escribir.
Razón por la cual se puso en contacto con el IEEA, para atender a personas adultas, “los educandos son los que demandan mi atención, por ello no los dejos solos, al contrario les brindo la oportunidad de estudiar, pues ellos no corrieron con la misma suerte que yo, el poder ir a la escuela a una edad temprana”.
“Atiendo a 50 adultos de secundaria y en proceso de alfabetización, alguna vez pensé en bajar la guardia, porque no veía adelanto en ellos, pero me propuse mejorar y fue así como logré que mis educandos continuaran estudiando y sobre todo alfabetizándose, además, me di cuenta, que mi comunidad necesita de la educación para salir adelante, finalizó Juana Inés.
La juventud también se suma al ejercito de alfabetizadores, como es el caso de Gregorio Hernández y Viridiana Reyes, estudiantes de la carrera de Administración, ellos mencionaron que la enseñanza es muy importante para cualquier persona, pues con ella se logra un desarrollo integral.
“Para mí, es mucho más importante el trabajo y el empeño que le pone una persona adulta al estudio, que una persona joven, quizá, es porque la adulta quiere superarse más y el joven no le toma mucha importancia, además, las personas adultas son como una esponja, absorben todo lo que le enseñamos” argumenta, Gregorio.
Para Viridiana enseñar es una experiencia muy bonita, atiende a 20 alumnos, en proceso de alfabetización, uno de primaria y 14 de secundaria, ella nos platica que deseaba estudiar pedagogía y convertirse en maestra, pero por diferentes razones se inclinó por la carrera de Administración, sin embargo gracias al IEEA, se le presentó la oportunidad de dar clases.
“Es importante enseñar a las personas adultas, yo atiendo desde amas de casa hasta campesinos, aunque no vengan todos los días por lo mismo de su trabajo, peo aún así le ponen empeño”, expresa, Viridiana.
La labor que realizan los asesores es totalmente altruista, ya que no reciben remuneración alguna, la preocupación porque su pueblo salga adelante, es su mejor paga, es sin duda, lo que los llevó a integrarse al equipo del IEEA, para sentirse satisfechos cada vez que alfabetizan a algún adulto de su comunidad.
Sergio Gabriel Galicia Herrera, “la ocupación de ser asesores es sólo brindar ayuda a las personas, ya que es muy lamentable ver que muchas de ellas no cuentan con su certificado de primaria o de secundaria”.
Otro caso es el María de Jesús Galán, quién también es asesora de la Plaza comunitaria de Tuxtepec; “Mi labor no sólo es ser la maestra, sino también amiga de mis educandos, a veces llegan con problemas y se refleja porque no ponen atención, por ello, platico con ellos para que así se tranquilicen y no se distraigan”.
“Llevo tres años siendo asesora, y lo que más me ha gustado es que los alumnos que no sabían leer y escribir, ya lo hacen fácilmente y han continuado sus estudios de primaria y secundaria, pues tanto ellos como yo, sabemos que aprender a leer y escribir es fundamental para progresar”, finalizó, María de Jesús.
Todos estos asesores cuentan historias sorprendentes de sus educandos, de cómo fueron desarrollando sus habilidades para la lecto – escritura y como el trabajo de meses, se ve reflejado al ver que una persona que no sabía leer y escribir, ahora lo hace, eso los motiva a seguir adelante y no bajar la guardia.
FOTO 1: La mayor recompensa para estos asesores, es saber que sus alumnos cuentan con su educación básica.