Los márgenes de la independencia editorial
OAXACA, Oax. 14 de febrero de 2014 (Quadratín).- Obligatorio resulta cuestionarnos, respecto de ¿Cuáles son los temas del debate en este momento para la CNTE? Desde una opinión personal considero que si bien es imprescindible un balance respecto de la jornada de lucha, sus alcances, limitaciones y tareas del qué hacer en torno de las afectaciones de la reforma educativa y sus leyes secundarias, dos son los asuntos que no deben quedar soslayados en el Tercer Congreso Nacional Extraordinario de la CNTE.
Uno tiene que ver con la reorganización del movimiento nacional, fijando un objetivo claro, que tenga que ver con el fortalecimiento del proyecto histórico de consolidar la unidad de los trabajadores en el país, que permita enfrentar la política actual de menoscabo de derechos sociales conquistados, la insurgencia magisterial sigue surgiendo a lo largo y ancho del país.
Es necesario mantener la lucha en lo nacional, sobre una orientación pensada, revisando las tácticas, estrategias y métodos, teniendo a la CNTE como el único referente actualmente movilizado en forma permanente en contra de las reformas estructurales.
Con tal calidad, debe generarse información consensada que permita un discurso articulado y sólido, capaz de generar la confianza en maestros y padres de familia, haciendo un llamado al magisterio nacional, a las organizaciones, a la clase trabajadora y a todos los sectores a conjuntar un gran movimiento.
El otro gran pendiente es la generación y establecimiento de un verdadero debate nacional en el tema que interesa a fondo a los trabajadores de la educación, el compromiso con los niños y niñas relativo a interrogantes como: ¿Qué se enseña? ¿Cómo se enseña? ¿Para qué se enseña?
Entre otras preguntas indispensables del proceso enseñanza aprendizaje. Después de la imposición en el país de una reforma educativa promulgada, pero deslegitimada desde su origen (pacto por México) y con un movimiento magisterial que sigue aglutinando fuerza y que crece día a día, en torno a la CNTE en la defensa de la educación pública y el empleo, debido a que la esencia de la reforma como se ha reconocido públicamente, no fue el tema educativo, sino el régimen laboral de los maestros y un andamiaje de control de los trabajadores de la educación a través de temas de carácter meramente administrativos, que son parte del establecimiento de modelos educativos neoliberales, mercantilistas, competitivos que ponen en riesgo el carácter social del derecho a la educación, derecho fundamental y legítimo por el que existen movimientos importantes de resistencia en América Latina y el país, que las Autoridades Educativas Mexicanas están ignorando, aseverando que se reformará la esencia del proceso educativo, a través de una consulta en foros para la creación de un nuevo modelo educativo nacional y una nueva educación normal, que solo convoca pensamientos afines, se realizará en lugares controlados, con la finalidad de simular una consulta participativa, pero en la cual ya se ha elaborado previamente su resultado.
Por ello, al no convocar y realizarse un debate verdadero en torno al tema que hoy anuncia la SEP, de entrada se encuentra deslegitimado.
La política pública educativa que se pretende implementar en el país, ahora con el tema del modelo educativo, es un tema experimentado en otros países de América Latina, analizar esas experiencias, mirar lo que pasa en otros países como parte de un ejercicio de comparación, resulta necesario.
Aquí un breve análisis, actualmente la educación en América Latina atraviesa una profunda crisis, resultado de las políticas universales que establecen una lógica competitiva e individualista consecuencia del modelo neoliberal, que sostiene: “la única solución para la crisis económica es la modernidad y desarrollo, a través de contraer su funciones y reducir costos no esenciales del Estado”.
Dicha imposición ha provocado en varios países desde hace ya casi dos décadas consecuencias severas, traduciéndose en conflictos sociales de gran envergadura, en países como Brasil (1995-2013), Chile (2006-2009, 2011-2013), Colombia (2011), en donde protestan y demandan amplios sectores de la sociedad, que sus sistemas educativos fomenten la gratuidad de la educación, a instituir la educación como un derecho social en torno de los principios de calidad y equidad debidamente entendidos, exigiendo el respeto a la diversidad y el combate a la desigualdad y discriminación.
Luchas estas que están también vinculadas a las de otros países como Grecia (2008), Portugal (2011) y España (2011-2013), en donde la política económica capitalista y el modelo neoliberal de globalización avanzó a pasos acelerados y que hoy tienen estallidos sociales que desestabilizan la Gobernabilidad de esos países y que evidencian las crisis económicas y educativas como consecuencia de políticas equivocadas; en los países antes mencionados se promovieron los vales educativos, los créditos educativos, el cambio de modelo educativo bajo un enfoque de competencias y productividad que ha llevado a las actuales crisis educativas que enfrentan los países mencionados.
Como se ha propuesto desde hace tiempo, desde la CNTE es necesario un modelo de educación alternativo, o bien el gran debate nacional por la educación pero generado desde la base, desde los sectores que participan o son directos receptores o participantes del proceso educativo, es un debate que legítimamente nos corresponde a los maestros dar y generar de manera participativa, con los padres de familia, autoridades educativas y todos los sectores sociales, esa es una de las luchas que hay que emprender en torno al nuevo modelo educativo de manera paralela a la consulta que ha emprendido la autoridad educativa federal. En la exigencia de hacer efectiva la gratuidad de la educación, la cual no puede pasar por un análisis reduccionista y empresarial como lo es preguntar el costo de cada estudiante: la gratuidad es un derecho de todos y un deber del Estado.
La determinación de legalizar las cuotas voluntarias en las escuelas es una apertura en la lógica de una política pública que mercantiliza la enseñanza, por ello es necesario continuar el movimiento magisterial generando un gran debate sobre las interrogantes al inicio planteadas, debate que al ser amplio deslegitimara cualquier acción que con visión simplista se realice en torno al tema del modelo educativo desde la Autoridad Educativa Federal.
Habrá entonces que hacer una estrategia para obligar a los gobiernos a privilegiar el dialogo, el debate de las ideas, una reforma educativa para que funcione debe tener forzosamente la aceptación de quienes la pondrán en práctica, de lo contrario generará solo descontentos, conflictos que pueden escalar en nuestro país, al mismo nivel de los existentes hoy en otros países de América, por ello empezar la revisión y el debate exhaustivo, participativo, amplio de ¿Para qué? y ¿Cómo educar? será una señal que el tema educativo es realmente una prioridad para exigir que se garantice la educación, es tarea de todos, pero es la CNTE a quien le corresponde generar condiciones para el establecimiento de la participación social.
* Ex secretario general de la Sección 22