Investiga FGEO muerte violenta de 2 mujeres triquis en Oaxaca de Juárez
OAXACA, Oax., 17 de mayo de 2016.- La directora Regional para América Latina y el Caribe del Centro de Derechos Reproductivos, Catalina Martínez Coral resaltó que el Estado mexicano no cuenta con políticas públicas que respondan ante la violencia obstétrica y muerte marte que sufren las mujeres en el país.
Durante su participación en el Tribunal Simbólico, organizado por el Grupo de Información en Reproducción Elegida (Gire), donde mujeres y familiares de víctimas de varios estados del país narraron sus testimonios, resaltó que los gobiernos deben respetar los derechos de los ciudadanos porque están en su Constitución y debe asumir las responsabilidades además de garantizar el cuidado a la salud.
“Los testimonio hablan por sí solos y muestran a la violencia obstétrica como lo que son, violaciones a derechos humanos: a través de sus historias se volvieron agentes activas de cambio social”, expresó.
Cada uno de sus testimonios, expresó, nos hizo conocer las injusticias por las que han pasado y se unió al llamado de justicia y reparación del daño que cada una de las victimas exige.
Resaltó que se nota la gran ausencia de leyes, políticas públicas integrales, reglamentos, protocolos, directivas, capacitaciones y formaciones en temas de salud, sexual y reproductiva.
Resaltó dos recomendaciones generales adoptadas por el Comité para eliminación de la Discriminación contra la Mujer de la ONU, donde se menciona que los estados deben garantizar el cuidado médico de alta calidad para todas las mujeres sin discriminación por motivo de raza, ingresos o ubicación geográfica.
Los estados deben garantizar servicios médicos maternos de calidad bajo el principio de acceso universal a la salud, lo hace ser responsable de mantener y regular el sistema públicos o privados.
Reiteró que estos estándares tienen que aterrizarse en el Estado mexicano a través de políticas públicas pero sobre todo de protocolos dignos de acceso a la salud pública, de formaciones en las carreras de medicina.
“Es necesario que se vuelva a la base de la ética y de las humanidades, se debe sacar a los médicos de ese cuadro científico en el que se han metido, porque mientras no se haga, el Estado seguirá alimentando la violencia contra las mujeres”, afirmó.
En tanto, la experta en derechos humanos, Aída Facio aseguró que no se trata de criminalizar a los médicos pero sí de cambiar su cultura, una cultura de valorar y cuidar la vida.
En su participación Alicia Yamin aseguró que México es un país convulsionado por violencia en su sociedad y coincidió con la falta de un marco legal adecuado.
“Faltan políticas públicas eficientes. Hay programas mal diseñados, mal supervisados porque los gobernantes hacen políticas que no les afectan a ellos porque no usan los servicios públicos, de ahí surge la falta de comprensión”, afirmó.