Respuesta a la violencia e inseguridad
OAXACA, Oax. 14 de febrero de 2014 (Quadratín).-La rueda del auto, ese ciclo inflamado.
La imagen industrial que nos lleva por terrenos de labranza y la cintura de la mujer, los muslos, la comba del seno.
El auto. La verdad próxima, escondida a la vista de todos.
El vinil de los asientos donde los cuerpos se abrazan alejados de las miradas de furia. Las muchachas de vestido largo y peinados recién salidos de la Estética.
El cigarrillo en los labios del hombre y la mujer recostados en el asiento de la noche.
El cigarrillo encendido en los dedos largos de la mujer.
La radio que suena para nadie. Toda la piel de las medias cargadas de aroma.
Los labios rojos de la mujer, el brillo aromado en la oscuridad.
Cuando todo termina la palma de las manos recobra su memoria del planchado.
El trabajo de los dedos para recobrar la forma del rulo, la cima del bucle.
La ciudad de vuelta con sus calles iluminadas, tan lejos del olor a vacas.
Los edificios que se aproximan convocados por el chirrido de los neumáticos.